Varias asociaciones de usuarios de las EPS (como Famisanar, Sura y Nueva EPS) publicaron un comunicado en el cual manifestaron su descontento con la nueva versión de la reforma a la salud que se redactó para la ponencia de primer debate en la Cámara de Representantes.
Por medio del documento, los representantes de estas organizaciones señalaron que el articulado no incluye sus “necesidades, observaciones y propuestas”. Además, hicieron una lista de varios puntos flacos que encontraron en el texto.
Vale recordar que la ponencia para primer debate tiene varias diferencias con el texto original de la reforma a la salud, que había sido radicado el pasado 13 de febrero por la ministra del ramo, Carolina Corcho, y el presidente Gustavo Petro.
Para empezar, las organizaciones de pacientes señalaron que el nuevo texto, que fue dado a conocer oficialmente el pasado 31 de marzo, no plantea alternativas viables para resolver varios de los problemas que hoy tiene el sistema de salud colombiano.
En el comunicado advirtieron que la iniciativa “no presenta soluciones concretas a la falta de infraestructura física y de personal en salud que garantice el acceso al servicio de salud en los territorios en donde hoy no se cuenta ni siquiera con un médico que atienda el primer nivel”.
También señalaron que las personas que se encuentran en zonas rurales dispersas no deberían seguir siendo atendidas, por lo que calificaron como “brigadas médicas esporádicas”. Y no consideraron que sea una opción viable que estas poblaciones deban tener que trasladarse a otros municipios para ser atendidas.
Sostuvieron que, pese a los cambios que le hicieron al texto, sigue sin haber claridad sobre cuál va a ser el actor del sistema encargado de la atención en salud. Más aún, señalaron que no hay certeza sobre las garantías que tendrán los ciudadanos para que sus tratamientos médicos no se vean interrumpidos.
De otro lado, manifestaron su descontento con el hecho de que se pierda la posibilidad que tienen hoy los pacientes de escoger libremente qué EPS quieren que los afilie y el prestador de salud al cual prefieren acudir.
Esto, sin embargo, ha sido cuestionado por la ministra Corcho, quien ha señalado que hay municipios en los cuales las personas no tienen la posibilidad de escoger su EPS de forma autónoma, tal y como están planteadas las cosas en el sistema de salud actual.
Otro punto que tocaron las organizaciones de pacientes tuvo que ver con los tiempos en la programación de las consultas y los servicios médicos, pues consideraron que el articulado no establece medidas para mejorar la oportunidad de la prestación de los servicios.
De hecho, señalaron que la situación es especialmente compleja con relación a las citas con especialistas. Argumentaron que la solución de esta problemática tiene que ver con mejorar la proporción de estos profesionales de la salud en comparación con la cantidad de población.
En el comunicado anotaron que tampoco hay claridad sobre la forma en la que se gestionará el acceso y la distribución de medicamentos (aunque se hace una breve mención de las droguerías y los gestores farmacéuticos dentro del sistema).
“La incertidumbre frente a la financiación del sistema de salud genera muchas preocupaciones con el riesgo a futuro de que debamos pagar por la prestación de los servicios. Desde una lógica libre de tecnicismos e intereses individuales, cada uno de los colombianos debe hacer el ejercicio de imaginarse cómo sería la atención con esta reforma”, anotaron los representantes de los pacientes.
De otro lado, señalaron que están de acuerdo con algunos aspectos que propone el Gobierno, como la mejora en la atención sanitaria. “Pero también consideramos que la verdadera reforma debe poner al usuario en el centro del debate e iniciar brindando la atención a la población que hoy no tiene un acceso real a la salud. Esos son los cambios que se necesitan”, concluyeron.