El cáncer es considerado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una de las principales causas de muerte en el mundo. Se calcula que cada año provoca la muerte de más de 10 millones de personas en todo el planeta, por lo cual es clave tomar tantas medidas como sea posible para prevenirlo y detectarlo a tiempo.
La OMS recuerda que si bien hay múltiples causas y factores de riesgo que incrementan las probabilidades de sufrir los distintos cáncer que existen, hay algunas medidas que se pueden tomar para prevenirlos en su conjunto.
La Clínica Mayo, una institución médica de Estados Unidos, cita ocho consejos útiles para mitigar el riesgo de padecer de cáncer.
Para empezar, menciona que es clave evitar el cigarrillo o dejar de fumar si el hábito ya está creado. “Fumar está relacionado con distintos tipos de cáncer, no solo con el cáncer de pulmón. Dejarlo ahora reducirá el riesgo de padecer cáncer en el futuro”, señala la Clínica Mayo.
En segunda instancia, hace referencia a la exposición excesiva a la luz del sol, que es la principal causa del cáncer de piel. Por ello, señala que se debe evitar el sol quedándose en la sombra, usar protector solar cuando la exposición no se pueda evitar y vestirse con ropa que proteja la piel.
De otro lado, subraya la alimentación balanceada. “Seguir una dieta saludable. Elige una dieta rica en frutas y verduras. Elige cereales integrales y proteínas magras. Limita el consumo de carnes procesadas”, indica la institución médica.
También sostiene que es clave hacer ejercicio durante la mayoría de días de la semana. Según explica, hay evidencia científica que muestra los beneficios de la actividad física en la reducción del riesgo de padecer cáncer. Basta con dedicarle 30 minutos al día durante unos cinco días de la semana.
Si una persona tiene una vida sedentaria, la recomendación de las autoridades sanitarias apunta a hacer ejercicio de forma suave al comienzo y luego incrementar su intensidad.
Esto también ayudará a mantener un peso saludable, que es otra de las recomendaciones de la Clínica Mayo. “Tener sobrepeso u obesidad incrementa el riesgo de padecer cáncer. Intenta lograr y mantener un peso saludable mediante una combinación de alimentación saludable y ejercicio regular”, asegura la institución.
Y argumenta que es clave evitar el alcohol. En caso de que una persona ya lo consuma, es fundamental que lo haga con moderación.
También aconseja que las personas identifiquen si tienen algún factor de riesgo para un tipo de cáncer específico y, junto a su médico tratante, evalúen a qué exámenes podrían someterse.
Por último, recomienda tener las vacunas al día e incluso preguntar por vacunas adicionales. “Algunos virus aumentan el riesgo de padecer cáncer. Algunas vacunas pueden ayudar a prevenir esos virus, incluido el que causa la hepatitis B, que aumenta el riesgo de cáncer de hígado, y el virus del papiloma humano, que aumenta el riesgo de cáncer del cuello del útero y de otros tipos de cáncer. Pregúntale al médico si las vacunas contra estos virus son adecuadas para ti”, concluye la Clínica Mayo.
La importancia de la detección oportuna
Por más precauciones que tomen las personas, siempre existirán algunos factores de riesgo de cáncer que se escapan a sus decisiones.
Pese a todo, otra medida que puede ser clave es la detección temprana, pues las personas que son diagnosticadas durante las primeras etapas del cáncer tienen mejores probabilidades de superar el cáncer. Además, la OMS señala que esto podría reducir las secuelas de la enfermedad y hacer que las terapias y los medicamentos sean más baratos.
En esa medida, cita tres componentes que pueden facilitar un diagnóstico precoz. Por un lado está el hecho de que los pacientes conozcan los síntomas y acudan al médico una vez perciben que algo no está bien en su organismo. En segunda instancia está la posibilidad que tienen de acceder a los servicios clínicos de evaluación y, por último, menciona la rapidez con la cual reciban el tratamiento.
“El diagnóstico precoz de los cánceres sintomáticos se puede y se debe hacer en todas las situaciones para la mayoría de los tipos de cáncer. Los programas oncológicos deben diseñarse para reducir los retrasos y los obstáculos al acceso a los servicios de diagnóstico, tratamiento y atención”, concluye la OMS.