El párkinson es una enfermedad que no se presenta de la misma forma en todos los pacientes, hay algunos que padecen de todos los síntomas, hay otros que no, e incluso hay individuos que los presentan en un orden diferente.
Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, explica que el párkinson es catalogado como una enfermedad progresiva que afecta de manera directa y significativa al sistema nervioso y partes del cuerpo que son controladas por los nervios.
La entidad de salud antes mencionada indica que los síntomas de esta afección empiezan a darse de manera lenta o paulatina, el primero por lo general se hace evidente cuando el paciente siente un temblor, apenas perceptible en la mano, o en otra parte del cuerpo. Aunque los temblores son lo más común, el trastorno también puede causar rigidez o una disminución del movimiento.
“En las etapas iniciales de la enfermedad de Parkinson, el rostro puede tener una expresión leve o nula. Es posible que los brazos no se balanceen cuando el paciente camina. El habla puede volverse suave o incomprensible. Los síntomas de la enfermedad de Parkinson se agravan a medida que la afección evoluciona”.
La Fundación contra el Párkinson menciona lo difícil que es en algunos casos saber si un paciente padece o no de esta enfermedad. Cuando un paciente es diagnosticado con párkinson, su cerebro no está en la capacidad de producir la suficiente cantidad de dopamina, esta sustancia química es fundamental, ya que permite el movimiento del cuerpo y regula el estado de ánimo de una persona.
Cuando este padecimiento se diagnostica a tiempo es posible darle un debido manejo por medio de la medicación, el profesional de la salud es quien formulará el más idóneo para cada persona e indicará en qué cantidades debe ingerirlo. Para poder determinar esto, el profesional de la salud tendrá en cuenta los síntomas y qué tan avanzada está la patología.
Síntomas tempranos del párkinson
La Fundación antes mencionada explica cuáles son los síntomas más frecuentes que presenta esta enfermedad. Cuando se perciben uno o varios, lo mejor es consultar con un profesional de la salud para saber si se padece de párkinson o si hay alguna alteración dentro del organismo que está generando esa serie de síntomas.
- Temblores: sentir temblores o contracciones en los dedos, labios, manos, mentón o en las piernas suele ser un síntoma común del párkinson.
- Letra pequeña: el cambio en la escritura de una persona puede ser un síntoma temprano de párkinson. “Algunas veces la forma en que se escribe cambia a medida que se envejece, o también cuando las manos o dedos se ponen rígidos o si se pierde la visión; sin embargo, estos cambios suceden a lo largo de un periodo de tiempo largo y no repentinamente”.
- Perdida del olfato: cuando un paciente presenta alteraciones significativas en su sentido del olfato, debe acudir con un profesional de la salud, sobre todo cuando se le imposibilita o no se percibe con facilidad olores frecuentes o fuertes que normalmente con perceptibles.
- Problemas para dormir: las personas con párkinson suelen tener movimientos involuntarios cuando están durmiendo, incluso hay quienes se caen de la cama, mientras duermen, en medio de una acción que no se puede controlar por sí sola. Cuando esto sucede es pertinente consultar con un profesional de la salud.
- Voz baja: por lo general, el volumen de la voz de una persona con párkinson disminuye o se percibe como si el paciente estuviese ronco todo el tiempo, ante ello es pertinente consultar para conocer las causas o saber si se derivan del párkinson.