Bogotá afronta en estos momentos un fuerte pico respiratorio debido al aumento de casos del virus Sincitial Respiratorio, la influenza, las Infecciones Respiratorias Agudas y el covid-19, una coyuntura que se espera se prolongue hasta finales de junio y que tiene a los servicios de pediatría saturados, tal como denunció hace unos días el Sindicato Nacional de Pediatras de Colombia (Sicolped).
Datos del Observatorio de Salud de Bogotá, con corte al 29 de mayo, indican que más del 96,1 por ciento de las camas pediátricas de Cuidados Intermedios y Cuidados Intensivos estaban ocupadas. Sin contar con que el porcentaje de hospitalización alcanza el 93 por ciento en el ámbito pediátrico.
Pero el fenómeno no es exclusivo de la capital del país. Miles en Medellín y Cali están experimentando una gripa fuerte, caracterizada por síntomas como tos, congestión nasal y dolor de cabeza.
Por ello, el llamado que hacen los especialistas es que las personas acudan al servicio de urgencias solo cuando su condición de salud lo amerite. Y desde el Hospital San Ignacio recuerdan que una urgencia “es la alteración de la integridad física o mental de una persona, causada por un trauma o por una enfermedad, que genere una demanda de atención médica inmediata y electiva tendiente a disminuir los riesgos de invalidez y muerte. Si no es el caso de su hijo o hija, le invitamos para que solicite una cita prioritaria con pediatría”.
La Secretaría Distrital de Salud, SDS, ha identificado que los menores que presentan mayor riesgo para adquirir y/o morir por Infecciones Respiratorias Agudas son los menores de un año, aquellos que tienen antecedente de prematurez, bajo peso al nacer, displasia broncopulmonar, oxígeno permanente, hospitalizaciones previas y esquemas de vacunación incompletos; en los mayores de un año la principal causa es la desnutrición.
El doctor David Forero-Peña aconseja el uso del tapabocas “pues evita la transmisión de ‘la gripa que está dando’ a los seres queridos o compañeros de trabajo. También es importante alimentarse e hidratarse bien para que el sistema inmune tenga un mejor desempeño. Solo usar medicamentos para el manejo de los síntomas; por ejemplo, si se tiene congestión nasal usar antihistamínico o jarabe, si hay tos. Hay que vigilar los síntomas, pues hay signos de alarma como fiebre persistente de varios días. Y lo más importante: nunca automedicarse con antibióticos, pues estos cuadros son virales y el antibiótico solo va a causar daño”.
En ese sentido, consulte inmediatamente al médico si un menor de 5 años presenta:
- Decaimiento a pesar de no tener fiebre.
- Respiración rápida, le “silba el pecho” o hace ruidos extraños al respirar.
- Tiene fiebre persistente.
- Carece de apetito.
- Tiene ataques o convulsiones.
- Hay cambios de coloración en los labios y la piel.
- Es importante hacer relación al hundimiento de las costillas, cuando respira es el signo más evidente de la dificultad respiratoria.
La SDS recomienda atender estas recomendaciones:
- Use el tapabocas para evitar contagio con las personas de su círculo social, laboral y familiar.
- Lávese las manos con agua y jabón varias veces al día.
- Alimente a los bebés menores de 6 meses exclusivamente con leche materna.
- Mantenga los esquemas de vacunación al día para niños y adultos mayores.
- Evite los cambios bruscos de temperatura, cubra la nariz y la boca al salir de lugares cerrados.
- Evite el consumo de cigarrillo y el contacto con personas fumadoras.
- Limpie y desinfecte los utensilios en el hogar y los juguetes en espacios de juego, en especial cuando un integrante de la familia tengan tos o gripa.
- Cuando los niños tengan gripa, no los envíe a las instituciones educativas.