El reconocido cantante, Pipe Bueno, recientemente, dio a conocer que había pasado angustiosos momentos cuando el menor de sus dos hijos enfermó gravemente de bronquilitis, (inflamación de los bronquiolos).
Sumado a ello, al pequeño de tan solo 6 meses, además del mal que ya tenía, le dio rhinovirus y enterovirus. Lo que centró la atención del público en ambas enfermedades.
Cabe mencionar que los cambios de clima y la exposición a los mismos, favorecen la proliferación de algunas enfermedades causadas por diferentes virus que pueden ocasionar síntomas similares como fiebre, malestar en el cuerpo, entre otros.
Entre ellos, está la infección por enterovirus, el que enfermó a Domenic, el hijo menor del artista en cuestión y su esposa, la influenciadora Luisa Fernanda W.
Hay que decir que estos, son un conjunto de virus “cuyo hábitat es el tracto intestinal; en un porcentaje pequeño dan lugar a enfermedades graves del sistema nervioso central, como la meningitis aséptica, encefalomielitis, ataxia cerebelar, síndrome de Guillain-Barré, mielitis transversa y poliomielitis, entre otros”, según informa Control Calidad Seimc.
Este tipo de virus puede ser confirmado en los pacientes, por medio de muestras de sangre analizadas en laboratorio, así como por medio de muestras de heces y aspirados nasofaríngeos. Ello, sumado a la secuenciación adicional y el análisis filogenético del virus.
Los enterovirus son un grupo de virus que pueden causar diversas enfermedades infecciosas y son responsables de epidemias anuales, como por ejemplo la gripe.
La enfermedad suele ser leve, pero se ha descubierto que afecta a los recién nacidos de manera diferente y a veces con mayor gravedad que a los niños mayores y a los adultos.
Asimismo, existen múltiples rutas de transmisión, particularmente en el periodo neonatal, incluido el intraparto por exposición a sangre, secreciones y/o heces maternas, o posnatal por contactos cercanos con cuidadores infectados.
Echovirus 11 (E-11) es un virus de ARN de cadena positiva que pertenece al género Enterovirus de la familia Picornaviridae.
Al igual que otros enterovirus, las infecciones por E-11 se asocian con un amplio espectro de enfermedades, que van desde síntomas leves e inespecíficos hasta trastornos sistémicos como sarpullido, enfermedad febril y trastornos neurológicos graves, como meningitis, encefalitis y parálisis flácida aguda (AFP).
También se ha informado que el Echovirus 11 (E-11) causa enfermedades graves en recién nacidos y lactantes, con una alta morbilidad y mortalidad. Además, el E-11 puede transmitirse verticalmente de madre a hijo, lo que aumenta la dificultad de controlar las infecciones.
Las infecciones pueden causar enfermedades inflamatorias graves en los recién nacidos, incluida la hepatitis aguda grave con coagulopatía. El E-11 y otros enterovirus han estado circulando continuamente en la región europea.
Sin embargo, los enterovirus distintos de la poliomielitis son comunes y están distribuidos en todo el mundo. Aunque las infecciones a menudo son asintomáticas, algunas pueden presentarse con infecciones del tracto respiratorio.
Algunos de los casos reportados tuvieron fiebre y apnea y progresaron a falla hepatocelular y renal dentro de la presentación de sepsis neonatal. Estos virus también están asociados con brotes ocasionales en los que una proporción inusualmente alta de pacientes desarrollan enfermedad clínica, a veces con consecuencias graves y fatales.
Por este motivo, la OMS aconseja a los médicos que atienden a recién nacidos y lactantes pequeños que presentan shock circulatorio que consideren un diagnóstico subyacente de sepsis y realicen las investigaciones diagnósticas apropiadas, incluidas las pruebas de enterovirus.
*Con información de Europa Press.