La Guajira es uno de los 32 departamentos de Colombia, y es una de las regiones que más genera preocupación en diferentes sectores de la sociedad. Además de ser nombrado en múltiples campañas políticas y sentencias, resoluciones y decretos.
Es que la situación sanitaria del territorio que lo lleva a encabezar los casos de desnutrición y muertes de menores por esta causa y otras afectaciones de salud, genera, sin discusión alguna, que se hagan llamados y se planteen propuestas para solucionar la crisis en La Guajira.
En esa línea, recientemente, desde el Congreso, aprobaron en plenaria de la Cámara, en segundo debate una iniciativa que busca atender uno de los frentes de atención en el departamento.
Específicamente, el proyecto de ley 058 de 2022, crea y autoriza la emisión de la estampilla pro-hospitales públicos de la Guajira. La propuesta busca, a través de estas estampillas, recaudar hasta $300.000 millones para la rehabilitación y fortalecimiento de los hospitales del departamento.
“Es nuestro deber buscar mecanismos que logren garantizar el cumplimiento de los derechos fundamentales, como es el de la salud, y esto se debe hacer con acciones concretas, brindado servicio esenciales a los centenares de personas que mueren en la Guajira debido a servicios precarios y una infraestructura en decadencia”, afirmó la ponente del proyecto, Saray Robayo.
De acuerdo con Robayo, en La Guajira la tasa de mortalidad en menores de edad duplica e incluso hasta triplica los promedios nacionales.
“Mientras que en La Guajira de cada 100.000 niños menores de 5 años mueren 16 por enfermedades respiratorias, en el resto del país la cifra es de menos de la mitad, es decir, 7 de cada 100.000 niños. Esto debido principalmente a la deficiencia en la infraestructura y los servicios hospitalarios”, argumentó la congresista del Partido de la U.
Insistió en que con la estampilla pro-hospitales, buscan fortalecer y reforzar la infraestructura de los hospitales del departamento, que en su mayoría no cuentan con la estructura debida, “en parte porque se trata de construcciones que requieren ser reparadas por el alto deterioro ocasionado por el tiempo, o porque necesitan fortalecer la dotación para la prestación del servicio a las comunidades”.
Finalmente, a esta iniciativa le faltan dos debates. Uno que se deberá adelantar en la Comisión Tercera del Senado y el otro, con el que terminaría, en la plenaria de esta misma corporación.
La desnutrición en cifras
Con corte al 17 de mayo, la Supersalud presentó un balance sobre este tema; teniendo también en cuenta el informe que emite el Instituto Nacional de Salud (INS)
En este informe se aprecia que las cifras de desnutrición aguda en menores de cinco años en el departamento “son alarmantes”. Los últimos datos, con corte al 15 de mayo de 2023, indican que existen 684 casos, de los cuales 280 (40,9%) están hospitalizados.
De acuerdo con esa misma información, 25 niños menores de cinco años murieron por desnutrición aguda (21 casos confirmados y 4 en estudio), 12 de ellos en Uribia, 5 en Maicao, 4 en Manaure, 3 en Riohacha y 1 en Dibulla.
Las muertes afectan principalmente a la población indígena (42,6%) y analizada la información por áreas, la rural dispersa tiene la mayor cantidad de casos (37,04%).
Los mayores casos se registran en niños mayores de 1 año (490), seguido por los de niños menores de seis meses (83). En total, la desnutrición aguda moderada afecta a 419 pequeños y la severa, a 265.
La mayor cantidad de casos se da en Uribia, con 226; seguido por Riohacha (162), Manaure (133) y Maicao (122).
Por EPS responsable en el régimen subsidiado, el número de casos los encabeza Anas Wayuu, con 230, seguido por Dusakawi (132), Cajacopi (72), EPS Familiar (60) y AIC (51).