El documento en el que tres ministros del Gobierno nacional manifestaron sus inquietudes sobre el proyecto de ley de reforma a la salud sigue generando reacciones en varios sectores políticos. Una de las que ya se pronunció fue la senadora del Partido de la U Norma Hurtado, quien también es presidenta de la Comisión Séptima del Senado, que será una de las instancias claves para la aprobación de la iniciativa.

La lista de preocupaciones y dudas fue elaborada por el ministro de Educación, Alejandro Gaviria; la ministra de Agricultura, Cecilia López, y el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo. Justamente con este último era con quien la senadora Norma Hurtado se había reunido en los últimos días para conversar sobre la viabilidad financiera de la reforma a la salud.

“No estuve equivocada al consultarle al ministro de Hacienda, en dos ocasiones, sobre el impacto de la reforma a la salud en el Marco Fiscal”, escribió Hurtado a través de su cuenta de Twitter. “Lamento que esas preocupaciones sobre la financiación y otros aspectos de la reforma a la salud no se hubiesen tenido en cuenta”, puntualizó la senadora.

Y también destacó algunos apartes del documento que elaboraron los tres ministros. Por ejemplo, indicó que el proyecto de ley plantea que se usarán los mismos recursos que ya están destinados hoy al sistema, pero no especifica otras fuentes de financiación que serían claves para costear múltiples gastos que se generarían durante la implementación de la propuesta.

Precisamente, una de las críticas más frecuentes al articulado del Ministerio de Salud tiene que ver con la proliferación de cargos públicos nuevos. El proyecto de ley plantea que las EPS dejarán de recibir recursos públicos para pagarles a las clínicas y los hospitales. En su lugar, los giros empezaría a hacerlos la Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud (Adres).

Esto implicará la creación de más burocracia, pues para lograr su objetivo se establecerán nuevas oficinas regionales de la Adres que permitan hacerle un mejor seguimiento a los recursos del sector salud en los departamentos.

Dilian Francisca Toro, presidenta del Partido de la U, y la ministra de Salud, Carolina Corcho, se reunieron a mediados de este mes para hablar sobre la reforma a la salud. | Foto: Cortesía Prensa La U

“Esto genera confusión sobre qué tipo de destinación deberán tener los recursos de la salud. ¿Alcanzará el dinero manejado de esta forma?”, se preguntó la senadora Hurtado.

También manifestó inquietud sobre las políticas que se implementarán para mejorar las condiciones de trabajo del personal de salud. Sostuvo que si bien está de acuerdo con la “dignificación laboral del talento humano en salud”, hay que aclarar cómo se logrará ese objetivo.

La idea del Ministerio de Salud es avanzar en la formalización de los trabajadores sanitarios, pues una buena parte de ellos hoy están trabajando bajo contratos de tercerización, lo cual los priva de acceder a múltiples prestaciones sociales.

“No obstante, persiste la incertidumbre fiscal para lograr esta meta que incluso ha llegado a estimarse en $ 9 billones”, indicó Hurtado.

El ministro de Educación, Alejandro Gaviria, la ministra de Agricultura, Cecilia López y el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo manifestaron sus reparos a la reforma a la salud en un documento conjunto. | Foto: Fotografías oficiales de los respectivos ministerios.

Asimismo, hizo énfasis en que hay múltiples dudas que persisten sobre otros asuntos, como la gestión del riesgo en salud.

Este es un rol que tienen las EPS en la actualidad, que generalmente consiste en conocer al detalle cuáles son las necesidades que tienen sus afiliados según distintas características demográficas, sanitarias y sociales, y a partir de ello tomar decisiones para mitigar los riesgos que enfrentan en materia de salud.

Si bien la reforma a la salud plantea la formalización del personal sanitario, hay dudas sobre los costos que esto traería. | Foto: Getty Images

Esto incluye la prevención y la promoción de la salud, algo que varias voces consideran que no está tan claro en la reforma propuesta por el Ministerio de Salud.

De igual forma, la senadora reiteró que hay preocupaciones de carácter constitucional relacionadas con las comunidades étnicas a las que vale la pena prestarles atención. Lo que sucede es que el texto del proyecto de ley plantea cambios que podrían afectar la estructura de los actores de salud de las comunidades indígenas.

Esas transformaciones, anotaron los ministros, podrían requerir mecanismos de consulta previa que, sin embargo, no se ejecutaron antes de la radicación del proyecto de ley en el Congreso de la República.

“Una reforma viable requiere concertación y escucha”, concluyó Hurtado, quien tendrá la tarea de revisar la reforma si llega a su comisión en los próximos meses.