En Bogotá, desde hace un tiempo, se viene implementando un programa enfocado completamente en garantizar el bienestar a los animales que se encuentran en condición de calle o que están sufriendo algún tipo de maltrato.Después de conseguir el aval del Concejo de la capital, fueron destinados los recursos necesarios para la formación del Instituto de Protección y Bienestar Animal, que pasó de ser una oficina más de la Alcaldía Mayor, a todo una entidad encargada de velar por la correcta aplicación de los derechos de los animales.Uno de los casos más sonados de maltrato de este año sucedió en mayo, cuando en redes sociales fue publicado el video de un hombre  que aparecía pateando salvajemente a una perrita que lo acompañaba, sin tener un motivo válido y sin mostrar piedad hacia su evidente sumisión.Esto te interesa: El perro que entuteló al Estado colombiano

El Instituto de Bienestar y Protección Animal hizo presencia en el lugar desde donde se había hecho la denuncia, junto con oficiales de la policía ambiental que se encargaron de efectuar la investigación y de llevar a cabo el rescate de Sasha, cuyos derechos eran proclamados por una multitud de personas que se ubicaron a las afueras del edificio donde convivía el animal con su agresor.De manera inmediata se hizo la aprehensión preventiva de Sasha, cuyos dueños declararon que desconocían el maltrato al que estaba siendo sometida debido a que el canino estaba siendo cuidado por un familiar, que ahora es buscado por las autoridades por su responsabilidad en los hechos.¿Qué te parece esta linda historia?: Hansel y Gretel, la historia de dos hermanos inseparablesLa ley 1774 de 2016, creada para generar más garantías a los animales que ocupen el territorio nacional,  impone multas de 5 a 60 salarios mínimos o penas de 1 (uno) a 3 (tres) años de prisión para quienes sean sorprendidos llevando a cabo actos que pongan en riesgo la integridad física y mental de cualquiera de estos seres.

Los dueños de la labrador negra, una joven pareja de ingenieros oriundos del Meta, quienes conviven con Sasha desde el 2012, demostraron su total rechazo hacia los actos cometidos por su familiar e iniciaron un proceso de verificación con el Instituto de Bienestar para determinar cuál debería ser el futuro de la mascota.Tras dos meses de evaluación y de investigación, se ha hecho público que Sasha está de nuevo con su familia, pues se ha esclarecido que no sufría de ningún tipo de maltrato por parte de sus verdaderos responsables y que a ella le hacía falta convivir con las personas que la adoptaron hace cinco años. “Se devolvió porque se hizo la evaluación de todo y se encontró que la familia ama a la perrita y la perrita ama a su familia. Se devolvió al saber que el agresor ya no está con la familia y viendo que la perrita está muy bien cuidada”, declaró un funcionario del distrito.Este funcionario también desmintió la información que ha sido divulgada por algunos medios, donde se especulaba que Sasha estaba sufriendo de depresión. Recalcó que la devolución se hizo porque fue evidente el amor que hay entre los dueños y su mascota y que lo mejor para el animal era volver a su hogar.

Fotos y video: Cortesía Instituto de Protección y Bienestar Animal de BogotáEsto no te lo puedes perder: Ir al trabajo con tu mascota, la nueva tendencia en Colombia