Hace algunos días, las Madres de Soacha, un colectivo de mujeres cuyos familiares fueron víctimas de falsos positivos, mostró su preocupación porque el Pacto Histórico las había, al parecer, excluido de las listas del Congreso. Sobre esa situación, el precandidato presidencial Gustavo Petro le salió al paso a esa polémica.
En ese sentido, Petro reconoció que se trató de un mal procedimiento y aseveró que los culpables de esa situación “somos nosotros”, al referirse al tema de las Madres de Soacha, y aprovechó el escenario de El Debate de SEMANA para enviarles un mensaje ante los hechos que han rodeado al país por los falsos positivos.
“Ellas han dicho según la prensa que ellas hablaron con alguien, pero ese alguien no aparece, no se habló personalmente conmigo, yo no supe, no sé si fue por otro grupo político o qué personas, fue un mal procedimiento, que las culpables no son ellas somos nosotros”, sostuvo Petro.
También señaló: “Hubo 6.402 jóvenes asesinados por un gobierno, eso fue una masacre que ni el peor paramilitar logró, por un gobierno. Un estado no puede asesinar, quizás el paramilitar tal o el guerrillero tal, asesina, pero es parte de una sociedad, no del Estado; el Estado no puede ser como ellos”.
No obstante, las mujeres que conforman esta organización desde hace varias semanas habían manifestado su intención de saltar a la arena política; sin embargo, aseguran que fueron ignoradas por el Pacto Histórico.
“El Pacto no tenía la obligación de aceptarnos en su lista, pero sí de respondernos. Hicimos todo el proceso y sin embargo varios del equipo de Gustavo Petro nos dejaron en visto. Dilatando todo. Sin dar la cara”, aseguró la organización desde su cuenta de Twitter.
Así mismo, las Madres de Soacha agregaron que fueron “utilizadas y burladas”. Este se convierte en el capítulo más reciente de las tensiones que vienen en esta convergencia política, en la que parece que pocos quedaron contentos.
Por otro lado, uno de los grandes temores que ha generado entre sus opositores el posible arribo de Gustavo Petro al poder es que, como ha ocurrido con la mayoría de los gobiernos de izquierda en Latinoamérica, se quede en la Casa de Nariño más allá de los cuatro años.
En ese sentido, este miércoles en El Debate de SEMANA, el precandidato presidencial despejó las dudas que existían sobre ese tema. “Dije que gobernaba con la Constitución de 1991, que prohíbe la reelección desde la Asamblea Nacional Constituyente. El siguiente gobierno, después de que termine el mío, lo elegirá el pueblo colombiano. Esperaría, continuando las reformas que nosotros vamos a construir en el primer gobierno del cambio histórico de Colombia”, afirmó.
Además, Gustavo Petro les confirmó a los colombianos que él, en caso de llegar a conducir el país en agosto de 2022, se quedará solo cuatro años en la Casa de Nariño. “Además, mi esposa no creo que aguante otros cuatro años. Ni mi hija”, aclaró.
Por último, Petro ha sido claro en que su gobierno solo sería un periodo, pero el proyecto del Pacto Histórico en el país requiere más de un cuatrienio. No obstante, según lo que dijo hoy en SEMANA, serán otros candidatos los que deberán continuar con su legado político.