La página Free Uribe se ha convertido en la forma en que el expresidente Álvaro Uribe cuenta su versión del proceso por soborno y fraude procesal por el que se encuentra privado de la libertad ante Estados Unidos. Forma parte del contrato que firmó su hijo Tomás con la firma lobista DCI Group por 40.000 dólares, unos 500 millones de pesos, el cual fue revelado hace pocos días por el periodista Joshua Goodman, de la agencia de noticias AP. ¿Se trata de una defensa de Uribe o una campaña de desprestigio?

En SEMANA en Vivo, Goodman contó cómo llegó al contrato que se firmó el pasado 20 de agosto. “Mi colega Christine Armario, de AP, estaba preparando una nota sobre unos nuevos cables desclasificados de Estados Unidos sobre el expresidente Uribe. Y cuando le preguntó sobre sus comentarios, no contestó él ni gente de su entorno, sino un gringo en Estados Unidos. Ahí se prendió para mí la bombita y dije: seguramente es una firma contratada. Cualquiera de nosotros puede mirar en el Departamento de Justicia los formularios que están requeridos a los lobistas, donde aparece el contrato”, explicó el periodista.

Goodman encontró que además de Uribe, esta firma lobista, creada hace 23 años por tres socios republicanos, tiene como clientes a la embajada de Japón en Washington y un empresario de la República Democrática del Congo que “ha sido controvertido y ha tenido problemas judiciales”, dice el periodista, quien asegura que la pregunta del millón es por qué el expresidente Uribe contrató una firma estadounidense cuando su proceso judicial es netamente en Colombia. “Quizás está buscando crear más presión internacional”. El abogado penalista Iván Cancino tiene su propia teoría sobre la firma lobista que creó la página Free Uribe. En principio, Cancino cree que les interesa mantener la buena imagen de Uribe en EE. UU., sobre todo ante los republicanos, con quienes siempre ha tenido una muy buena relación. “Para nadie es un secreto que en los últimos años en Colombia, cuando una persona es privada de la libertad, tiene problemas con su visa, que para ellos es muy importante desde el punto de vista familiar y empresarial”, explica. Por último, Cancino cree que Uribe quiere dejar claro cuáles fueron sus acciones contra el narcotráfico y los paramilitares que extraditó.

Free Uribe tiene cuatro partes: hechos sobre Álvaro Uribe, hechos sobre el caso, hechos sobre las Farc y hechos sobre los acusadores de Uribe. Una de las cosas que más ha llamado la atención es que en esta página se dice que la Corte Suprema de Justicia “montó un ‘caso’ en los últimos años contra Álvaro Uribe sin pruebas, impulsado por acusaciones políticas que en repetidas ocasiones han sido sacadas de los tribunales”. Al respecto, el abogado Miguel Ángel del Río Malo considera que existe una campaña de desprestigio contra la Corte y de señalamiento contra Iván Cepeda, y sobre “las nuevas juventudes de las Farc”, como las han llamado el propio Uribe y su hijo Tomás, que el jurista considera que son “muy peligrosas” porque pueden avivar un ataque hacia cierto sector de la sociedad. “Matarife es un éxito de la libertad de expresión, sobre hechos probados. Sin embargo, Uribe Vélez —con esta empresa de ‘lobby‘— acude a los signos de manipulación (…) Los hechos que acompañan las manifestaciones de DCI son comprobables, no son falsos, pero la unión de esos hechos descontextualizados en el tiempo, que hablan del Plan Colombia que terminó hace tiempo, lo que tratan es de lastimar una institución como la Corte”, aseguró. El periodista Joshua Goodman considera que esta estrategia de Uribe llega en una coyuntura compleja para Estados Unidos, que está ‘ad portas‘ de la elección presidencial. “Trasladar, si ese es el objetivo, esa polarización en torno a Uribe hacia Washington, también va a hacer que las fuerzas políticas de demócratas y republicanos se polaricen en torno a Uribe. El Plan Colombia era de los demócratas. De hecho, Free Uribe lo resalta, que fue firmado por Bill Clinton. Hay gente del Partido Demócrata que no comparte esos ataques”, dijo el reportero de Associated Press. Con respecto a Free Uribe, Cancino también señala que podría ser el “alter ego de Matarife”, en el sentido en que así como los uribistas consideran la serie un ataque contra su líder, la página busca poner su versión ante la opinión pública. Falta ver si seguirá funcionando ahora que el proceso pasó a manos de la Fiscalía. El caso de Uribe trasciende el plano judicial, ha generado mayor polarización. Así como nació Free Uribe, nació su competencia: la Plataforma de Monitoreo Internacional.