La plataforma Uber podrá volver a funcionar normalmente en Colombia.Así lo han resuelto los magistrados del Tribunal Superior de Bogotá tras echar por tierra la sentencia del pasado 20 de diciembre de 2019 proferida en favor de la Superintendencia de Industria y Comercio, SIC, que consideró que la empresa incurría en actos de competencia desleal por violación de normas y desviación de clientela, al prestar irregularmente el servicio público individual de transporte.El Tribunal anunció que declaró terminado el proceso del pasado mes de diciembre y da luz verde a que la plataforma pueda funcionar legalmente en Colombia tal y como lo venía haciendo antes de que la SIC hiciera este llamado ante la justicia.

LA SIC resaltó que la decisión del tribunal fue por prescripción y no por el asunto de fondo, que es competencia desleal. Sin embargo, esa entidad dijo que respeta las decisiones judiciales.Reiteró que considera necesario reglamentar las aplicaciones y legislar sobre el tema. "La SIC seguirá insistiendo en la necesidad de regular todas las plataformas digitales", afirmó.Uber, por su parte, calificó de hito el fallo y anunció que lo estudiará a fondo para definir sus próximos paso en cuanto al desarrollo de su modelo de negocio en Colombia.Esta es la sentencia emitida por el Tribunal: 

En su comunicado dice: "Reiteramos la urgencia de tener normas claras que permitan potenciar el crecimiento de estos sectores potenciados por la tecnología y así transformar a Colombia en una sociedad más incluyente, más segura y con mejores ciudades".Y agrega: "La tecnología y la innovación cumplen un rol clave en el desarrollo y competitividad de nuestro país. Colombia debe ser un país que defiende la neutralidad de red y genera condiciones favorables para la inversión local y extranjera".La prohibición de la plataforma de Uber por competencia desleal y por violación de las normas y desviación de clientela que se sentenció el pasado mes de diciembre, marcó un precedente dentro del derecho de la competencia y, de hecho, vinculaba a la estructura de Uber a nivel mundial. Dicha decisión también ordenaba a que los datos relacionados con Uber debían suspenderse entre las empresas de telecomunicación.