Esteban Piñeros Ríos o Chila, como lo conocían, era un hombre de 57 años que trabajaba como auxiliar de enfermería en el Hospital San Rafael de Leticia. El miércoles 13 de mayo perdió la batalla contra el coronavirus en la capital del país.
“Lastimosamente él se contagió haciendo lo que le gustaba”, le dijo a este medio su hijo Steven Piñeros, quien también trabaja en el hospital. Su padre atendió a una paciente que dio positivo para covid-19 y días después, empezó a sentir los síntomas él mismo, le dio neumonía y le tomaron la muestra para el virus el 4 de mayo. “Ya te imaginarás la rabia que tengo porque es la hora y nunca llego el resultado acá”. Cuando el estado de salud del auxiliar se complicó, el 7 de mayo, tuvieron que trasladarlo en una ambulancia aérea a la capital del país, ya que como Leticia no tiene unidades de cuidados intensivos, terminó en una de Bogotá. Allí le tomaron una segunda muestra que dio positivo para covid-19. Steven, hijo de Esteban Piñeros con sus hermanas Heidy y María Isabel, lo recuerda como un padre excelente y un gran esposo de su mamá Martha Cecilia Vanegas. Dice, también, que amaba el fútbol y que, de hecho, entrenaba a los jóvenes del municipio. “Era arquero y entrenaba a los arqueros de la Selección Amazonas. Tanto fue el amor al deporte que en la finca hizo una cancha de fútbol para que sus amigos de la liga de 45 años jugarán allí todos los fines de semana la liga”, relató. "Y ahora que vuelva a turnos en el hospital, sé que me va a dar duro porque siempre cuando él trabajaba salíamos a tomarnos un café y a comer algo".
El auxiliar de enfermería fallecido se suma a los más de 600 trabajadores de la salud contagiados que reporta el Instituto Nacional de Salud. Su muerte es el reflejo, no sólo del riesgo del virus para quienes lo combaten en la primera línea, sino del peligro que corren quienes lo hacen en las regiones más apartadas y vulnerables de Colombia.