Colombia aún no sale de la conmoción por el caso del presunto abuso sexual del que habría sido víctima una menor de edad indígena en el departamento de Risaralda en el cual, según la denuncia, los responsables serían siete soldados del Ejército Nacional. Sobre ese caso, el presidente de la república, Iván Duque, calificó el hecho como un acto ruin, que enloda el honor de las Fuerzas Militares, al advertir que su Gobierno no tolerará ningún abuso en contra de menores de edad.
A través de su cuenta oficial de Twitter, el mandatario dio instrucciones al ministro de Defensa Carlos Holmes Trujillo para que avance rápidamente en la investigación para esclarecer los hechos. “No toleramos ningún tipo de abuso a menores de edad y mucho menos cuando involucre uniformados que enlodan honor de las fuerzas con actos ruines como el denunciado en Pereira contra niña indígena. He dado orden a mindefensa apoyar diligentemente investigaciones de FiscaliaCol”, dice el trino de Duque. No obstante, por medio de un comunicado, el comando de la Octava Brigada del Ejército Nacional confirmó que se adelanta una investigación contra siete soldados del Batallón San Mateo, quienes habrían abusado sexualmente de una menor de edad, perteneciente al resguardo indígena embera chamí. Los hechos se registraron en predios de la comunidad indígena Menduará del Resguardo Gito Dokabú, del municipio de Pueblo Rico, en Risaralda, límites con Chocó. Según el Ejército, los hechos fueron puestos en conocimiento del comandante de la unidad y las autoridades competentes iniciaron la investigación para tomar acciones judiciales contra los presuntos responsables. El caso fue confirmado por el gobernador del Resguardo Unificado de Pueblo Rico, Juan Guillermo Arenas Nacavera, quien indicó que la niña desapareció el domingo y fue encontrada, posteriormente, en un estado lamentable de salud en una escuela del sector. “La menor apareció en el establecimiento educativo Pío XXII Agroambiental de Santa Cecilia donde estaban ahí los uniformados. La niña no caminaba bien, fue remitida al centro de salud y ahí fue donde se dieron cuenta que fue violada por siete soldados”, dijo en diálogo con RCN Radio.
Finalmente, las autoridades indígenas están solicitando que los siete señalados sean entregados a la organización indígena para aplicarles la ley que a ellos los rige, y que el batallón San Mateo salga de la zona.