Las comunidades que habitan zonas cercanas al Nevado del Ruiz despertaron durante el fin de semana con densa atmósfera que incluyó ceniza y la sensación de que el volcán decidió despertar luego de un largo sueño. Sin embargo la realidad es otra, el Nevado del Ruiz hace años que no duerme. En Semana Noticias, Martha Calvache, directora de Geoamenazas del Servicio Geológico Colombiano, explicó que la actividad del volcán, desde 2012, lo deja en nivel amarillo.
“Hubo un incremento en el número de sismos, pero la gran mayoría fueron muy pequeños y no fueron sentidos por las personas. En 2012 el volcán aumentó su actividad y cambiaron los niéveles incluso con algunas erupciones, en adelante el nivel ha sido amarillo, a las alcaldías y las gobernaciones se les comunica cuando hay alguna novedad”, señaló la funcionaria.
Calvache insistió en que en consejos comunicatorios se detallan las circunstancias y se invita a entidades a trabajar conjuntamente para que se enteren de cuáles son las herramientas y así escuchar las inquietudes de la comunidad y las autoridades. “Hay algo que está pasando por dentro y eso produce un incremento o rompe, quiere decir que hay sismos. Es como una gaseosa, cuando hay gases tiende a subir, el vapor también indica que tendremos cenizas”, dijo Calvache. Para la funcionaria, experta en temas de actividad volcánica, lo importante es estar alerta para comunicar a los habitantes y que de esta forma la propia comunidad conozca en detalle el estado del “paciente” que en este caso, según la directora, es el volcán. “Hay señales que preocupan a la comunidad sobre todo cuando hay cierta actividad, el mensaje es no actuar con pánico, pero tampoco es andar despreocupado”. Recomendaciones básicas que entrega la funcionaria del Servicio Geológico Colombiano de vivir cerca a un volcán: qué debo hacer, cómo debo actuar frente a determinadas circunstancias, qué indican las alertas y seguir o estar atentos a los avisos del sistema de atención de riesgos, que incluye planes, herramientas o respuestas ante eventuales situaciones. “Cada alcalde debe tener unas acciones, si un volcán pasa a amarillo qué pueden hacer, la actividad volcánica indica muchas cosas y si las administraciones municipales no conocen el tema puede ser un problema”.
Elemental para la directora es que todos, incluso los que no viven cerca a un volcán, deben tener conocimiento y alimentar esa experiencia para enfrentar fenómenos naturales, como las actividades volcánicas.