El médico pediatra Héctor Garrido empezó a sentir los síntomas del covid -19 justo cuando iba a arrancar la cuarentena en España, donde vivía desde hace 16 años. Alejandro Garrido recuerda que su hermano lo llamó hace un mes, desde un supermercado al que entró para aprovisionarse de alimentos, antes de iniciarse el aislamiento obligatorio en ese país.
“Él me dijo que se sentía mal, y dos días antes había tenido turno en el hospital”, relató su familiar. El especialista trabajaba en un hospital cercano a Madrid, en la localidad de Puerto Llano, donde formaba parte de la primera línea de atención y lucha contra el coronavirus. En el momento en el que empezó a sentir los síntomas, no se sabía cuáles de sus pacientes podrían ser portadores del virus, según manifestó a Semana Noticias Alejandro Garrido.
La sintomatología inicial que presentó este médico de 59 años fue dolor de estómago y mareo, en los primeros 10 días de la cuarentena, lo cual lo llevó a urgencias del hospital. Allí requirió de un respirador artificial al que estuvo conectado durante 21 días, hasta que falleció. Durante sus últimos días de vida permaneció solo, pues no permitían el ingreso de su esposa, quien también es trabajadora de la salud, ni tampoco sus dos hijos adolescentes. Sin embargo, a diario le daban un reporte, a veces con picos de mejoría, pero una falla renal cegó su vida.
Su colega Luis Miguel Sossa manifestó que el covid- 19 le arrebató al mundo un médico apasionado por servirle a la humanidad, un profesional quien siempre se caracterizó por ser sereno y paciente en los momentos más difíciles. Garrido era egresado de la Universidad Industrial de Santander.
Lo sucedido en medio de la pandemia les cambió la vida a la familia Garrido, Alejandro confesó que está en cuarentena y que teme ir a un hospital y quizás ser contagiado por un paciente.
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