Un tercer interno de la cárcel de Villavicencio falleció en al hospital departamental de la capital del Meta después de ser contagiado por el covid-19. El privado de la libertad, de apellido Hernández, dio positivo el pasado fin de semana, después de conocerse la noticia del segundo interno fallecido por coronavirus. El hombre, mayor de 60 años, estuvo ingresado en la unidad de cuidados intensivos pero el pasado domingo reportó mejorías en su estado de salud y fue trasladado al pasillo de aislados. Sin embargo, en las últimas horas se conoció que falleció a raíz de una complicación por el coronavirus. La noticia se supo horas después de que el gobernador del Meta confirmara que seis miembros más de ese centro penitenciario dieran positivo en la prueba. Según fuentes del sindicato de guardianes en este centro, tres contagiados son internos y tres son funcionarios de la guardia.

En total, en la cárcel de Villavicencio hay 24 contagiados, 3 de ellos ya fallecidos. El resto, según supo Semana Noticias, no presenta síntomas ni han sido remitidos al centro hospitalario, y están aislados en el interior de la cárcel. Los guardianes, por su parte, piden que el Instituto Nacional de Salud realice pruebas a todos los funcionarios e internos del centro para prevenir un contagio masivo y piden, asimismo, insumos para protegerse al ir a sus casas después de la jornada laboral por temor a contagiar a sus familias y a la población no privada de la libertad de Villavicencio. Esta es una de las denuncias que han dado a conocer:

El primer interno por coronavirus falleció el 5 de abril y el segundo el 7 de abril, sin embargo, se supo postmortem que había contraído el virus. Ambos eran adultos mayores.

Según el Inpec y el Ministerio de Justicia, el de Villavicencio es el único centro carcelario que reporta casos de covid-19. La ministra de Justicia, Margarita Cabello, aseguró en una rueda de prensa virtual que esto se produjo porque se rompió algún protocolo. Desde el sindicato aseguran que no cuentan con elementos de protección necesarios y que se han visto obligados a hacer rifas o pedir ayudas a ONG y terceras personas para recibir mascarillas, antibacteriales y guantes como donativos. A raíz de estas peticiones, guardianes denunciaron que el director del Inpec, brigadier general Norberto Mujica, habría amenazado, en una reunión virtual, con aplicar sanciones penales y abrir procesos a quienes alertaran de forma pública de esta supuesta falta de insumos.