La directora del Instituto Nacional de Salud (INS), Martha Ospina, desató una tormenta cuando, durante una sesión virtual de la Comisión Séptima del Senado, dijo que el 80 por ciento de las muestras que llegan al laboratorio que dirige están mal empacadas. En la mañana del viernes, Ospina aclaró que tal falla no afecta para nada la calidad de los resultados que entrega el instituto.
“Se refirieron al tema del empaque mencionado por la Procuraduría y si eso generaba un aumento en el tiempo de procesamiento de las muestras por parte del INS. A esa pregunta respondí, y efectivamente conté que había problemas de algunas muestras de embalaje, de marca, de la cédula, de la identificación de la fecha de toma. Datos faltantes para la base de datos que se digita”, dijo. Estos problemas demoran la capacidad de respuesta y de recibo de los datos sobre los posibles casos de covid-19.
La directora añadió que los equipos de laboratorio tienen la capacidad para identificar si la muestra tiene calidad o no para ser procesada. Es decir, según ella, la calidad de los resultados no se ve afectada por esto, pues se trata de procesos distintos. No obstante, admitió que tal demora sí tiene un impacto en la información que posteriormente sirve para el análisis. Esto no solo destapa la precariedad en que la información se procesa en las secretarías de salud departamentales, sino que también cómo los funcionarios del INS deben, manualmente, digitar los datos de cada una de las muestras que llegan a sus instalaciones desde todos los rincones del país. Esta denuncia ya la había recibido Semana Noticias días atrás cuando, por parte de una persona que trabaja al interior de estos laboratorios, conoció que el registro de datos se hace de forma manual y por eso suele haber vacíos en la información.
Ospina no hizo mayor énfasis en eso, pero sí contó que hay ya dos pilotos en entidades territoriales para que el sistema cambie y que sean las secretarías las que digiten la información de las muestras. De esta manera, el instituto solo tendría que verificar la información cuando arriban, más no ingresarla en la base de datos.