En diálogo con Semana Noticias, el abogado Miguel Ángel del Río explicó el trasfondo de la orden que emitió el juez séptimo penal del circuito de Barranquilla, en la que le exigió a la Fiscalía entregar el faltante de los audios que involucran los procesos relacionados con el asesinato del ganadero José ‘Ñeñe’ Hernández y que abrió el episodio de la denominada ‘Ñeñepolítica’.Miguel Ángel del Río es abogado de la familia Óscar Rodríguez, asesinado por error en un acto sicarial ordenado, aparentemente, por el José Guillermo Hernández, alias Ñeñe Hernández, y cometido por la banda de Marquitos Figueroa.
“Esto, en un escenario natural, no debiera ser una celebración porque el descubrimiento probatorio es lo más normal, pero debido a todos los inconvenientes, y con relación al problema político que se ha generado, para nosotros es un triunfo, porque hace un tiempo veníamos haciendo la exigencia de la entrega completa de los audios”, dijo Del Río.
Dichos audios, señaló el abogado, van desde mayo de 2018 hasta noviembre de 2019. “Es decir, la época más importante”, dijo Del Río haciendo alusión a la época preelectoral y poselectoral, por lo cual, nuevamente lanzó cuestionamientos en contra del fiscal general, Francisco Barbosa, en el sentido de que debería “hacerse a un lado” para que se adelante una investigación transparente y no interfiera por su estrecha amistad con el presidente Iván Duque.“Barbosa ha intentado ocultar esta información porque desde abril de 2019, ellos tuvieron información de primera mano de que en esos audios había información relevante que implicaba la campaña del presidente Iván Duque y, por eso, se ha dilatado la entrega de ese material probatorio”, señaló el abogado. En tal sentido, insistió en “que nos entreguen los audios que son”, afirmando que no permitirá que le entreguen un material repetido al que ya le habían hecho llegar en los pasados meses.
Lo que viene es, según explicó, hace una solicitud al almacén de evidencias de la Fiscalía o ante el funcionario que tiene los audios en este momento, un proceso que tardaría, al menos, unas dos semanas, aclaró Del Río. Finalmente, rechazó las acusaciones que se han hecho en su contra frente a que él tendría interés político detrás de las denuncias que hace alrededor de la ‘Ñeñepolítica’. “Lo que tengo es la necesidad ciudadana de dar a conocer la verdad, independientemente de quién salga responsabilizado”.¿Quién era el Ñeñe Hernández?Muchos colombianos solo vinieron a saber quién era José Guillermo Hernández el día de su muerte. La circunstancias en que se dio y el aparente motivo pesaron en el cubrimiento que hicieron los medios del hecho. El ‘Ñeñe’, como era conocido el ganadero cesarense, fue asesinado en Uberaba, un pueblo del interior de Brasil, donde asistía a una feria. Iba en un taxi e intentaron, aparentemente, robarle su reloj Rólex de oro. Tres tiros en el abdomen acabaron con su vida. Todo ocurrió el 2 de mayo de 2019.El otro dato que le dio relevancia al hecho fue que era el esposo de María Mónica Urbina, la primera señorita Colombia que tuvo La Guajira. Se habían casado en el año 2011 y tenían dos hijos, Manuela y Nicolás. La tragedia de la reina llevó a descubrir que Hernández era un hombre poderoso con vínculos oscuros detrás de su exitosa fachada de ganadero y empresario de los combustibles. Lo más publicitado de sus líos con la justicia fue la apertura de una investigación en su contra en el año 2015 por el asesinato de Óscar Eduardo Rodríguez Pomar, hijo de Carlos Rodríguez, dueño de la sastrería GQ, de Barranquilla, y prestamista reconocido. Una de las hipótesis es que, en ese crimen, estuvo vinculado el ‘Ñeñe’ Hernández, por una deuda pendiente de más de 1.000 millones de pesos con Carlos Rodríguez.
En junio del 2019, cuando la Fiscalía anunció que le había incautado más de 1,2 billones de pesos a la estructura criminal del señalado narcotraficante y paramilitar Marcos Figueroa, alias ‘Marquitos’, el Ñeñe apareció en su organigrama como parte de su brazo financiero.