El Partido Conservador es donde milita la vicepresidenta, Marta Lucía Ramírez, y por eso se le dio un espaldarazo en medio de todos los señalamientos que le están haciendo por cuenta de un problema de tráfico de heroína que tuvo su hermano en 1997. Los voceros del conservatismo en el Congreso manifestaron que no es posible que en Colombia se quiera juzgar y señalar a alguien por un delito de sangre, ya que no existe esa tipificación en nuestro país.
El vocero en Senado, Juan Diego Gómez, señaló que no se puede poner en duda la hoja de vida de la vicepresidente y mucho menos pedirle la renuncia por un tema familiar en el cual ella no tiene nada que ver. “La vicepresidenta es una mujer honorable y los errores que haya cometido su hermano hace más de 20 años, no ponen en tela de juicio su pulcritud, ni su transparencia en la vida pública. Es un asunto lamentable, familiar, que seguramente convocó su solidaridad y es claro que los delitos de sangre no existen, por esta razón creemos que no está bien plantear un reproche como el que se ha planteado, ni mucho menos pedir la renuncia”, dijo el legislador.
Asimismo el vocero en Cámara, Juan Carlos Wills, calificó de oportunista a, Gustavo Petro, por haberle pedido la renuncia a la vicepresidente en medio de la plenaria del Senado.
“Respaldamos y defendemos a la doctora Marta Lucía Ramírez. Es una evidente cortina de humo que está haciendo el senador Petro, que no ha sido capaz de demostrar, ni de salir a darle explicaciones al país sobre qué hacía recibiendo bolsas de dinero antes de campaña”.
Los congresistas señalaron que la vicepresidente hizo bien al ponerle la cara al país y explicando qué lo que pasó hace más de 23 años con su hermano, pero reiteraron que ese no es motivo para que deje el cargo.