Rasmus Hansson, uno de los tres diputados del Partido Verde en el Parlamento noruego, nominó al presidente Gustavo Petro Urrego al Premio Nobel de la Paz 2024. “Él muestra en la práctica que el diálogo con los actores armados puede ser un medio eficaz para solucionar conflictos y reducir la violencia”, expresó Hansson, al sostener que “Petro promueve una política de paz creadora, moderna e integral”.

El jefe de Estado agradeció la nominación y señaló que seguirá trabajando por la paz. “Agradezco a Rasmus Hansson que me haya nominado al premio Nobel de la Paz. Seguiremos con todo lo que tenemos por la paz de Colombia”, manifestó el presidente Petro en su cuenta de X. El diputado Hansson es biólogo y químico de la Universidad de Oslo, especializado en administración de negocios y política internacional en la Universidad La Trobe, de Melbourne (Australia).

Ha ejercido como alto funcionario del Ministerio de Ambiente de Noruega, ha ocupado cargos de distintos niveles en el Instituto Polar Noruego y también fue secretario general de la organización no gubernamental WWF Noruega, entre 2000 y 2012. Desde 2021 es vicepresidente del comité directivo del Partido Verde Noruego.

En diálogo con Vicky en SEMANA, el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, fue consultado sobre el particular. “Muy curioso. Para mí la paz es el imperio de la ley en todos los rincones del país. La paz no se negocia contemporizando con criminales, como es el propósito de lo que mal se conoce como la ‘paz total’ sino que la paz se impone con seguridad y justicia en todo el territorio nacional y, bueno, digamos que en eso nos distanciamos mucho de lo que es el propósito y las apreciaciones y las acciones permanentes del Gobierno, porque en las regiones de Colombia hay desasosiego, porque en muchos sitios hoy se viven situaciones de inseguridad tan o más azarosas que las registradas hace 20 años”.

“El premio Nobel de Paz deberían dárselo a quien hace un esfuerzo por imponer ese valor democrático con seguridad y justicia”, agregó el gobernador, quien recordó que, contrario a intenciones de paz, el presidente Gustavo Petro ha procedido contra su departamento, en supuesta retaliación por el no apoyo de esa región del país con el jefe de Estado.

El gobernador recordó que el presidente Petro ha tomado medidas contra el departamento por “retaliación”. En primer lugar, la Gobernación tenía a cargo la tramitación y celebración de contratos de concesión; también la fiscalización, seguimiento y control de la extracción de materiales. Sin embargo, el Gobierno reajustó su política y optó por quitarle estas tareas, justificado en la actualización de la estrategia para resolver los inconvenientes de esta actividad.

Luego, recordó el gobernador de Antioquia, la Superintendencia Nacional de Salud ordenó en ese momento la toma de posesión inmediata de bienes, haberes y negocios y la intervención forzosa administrativa de la EPS Savia Salud, tras evidenciar, según informó en aquella oportunidad, “graves y reiteradas fallas en la atención de sus más de 1,6 millones de usuarios y en el manejo de los recursos públicos del sistema de salud”. El asunto es que ahora la EPS, en mano del Gobierno Petro, está peor, según denunció un congresista del Centro Democrático que radicó demanda para revertir la decisión de la Supersalud.

Finalmente, recordó el mandatario de los antioqueños, el presidente Petro puso objeciones a la ampliación de autopistas fundamentales para el departamento, argumento que únicamente favorece a los ricos. “Alguien dirá, o lo leía en la prensa, que 6.000 millones de dólares —lo que costaría comprar 3 millones de hectáreas para entregárselas a los pobladores rurales colombianos, como se acordó en los acuerdos de paz— es mucha plata para entregársela a los campesinos. Pero sí se van y se tiran un poco de plata en unas 4G de autopistas que solo sirven para importar productos de los puertos para matar la producción nacional en las grandes ciudades de Colombia. Allí, si no es costoso, no es costoso, porque quienes van por esas autopistas son las tractomulas, cargadas de las mercancías de los dueños del gran capital en Colombia”, expuso el presidente Petro.

De todos los premios Nobel, solo el galardón de paz se entrega en Oslo, Noruega. Los demás, son adjudicados en Estocolmo, Suecia.