Carolina Ochoa, médica anestesióloga colombiana que vive en Madrid, habló en el programa “Vicky en Semana” sobre su experiencia en España durante el brote de covid-19 del que ya se han contagiado más de 56 mil personas. “Impotencia, porque no tenemos el material suficiente, porque no tenemos cómo protegernos adecuadamente el personal sanitario”, dijo Ochoa, mientras relataba cómo es la vida laboral de su gremio en la coyuntura. Según ella, allá hay escasez de respiradores, que es un fenómeno que se presenta en varios países del mundo. Asimismo, aseguró que el hospital donde trabaja está completamente colapsado, a tal punto que han tenido que habilitar la biblioteca del mismo para atender pacientes.
Por otro lado, la médica aseguró que el 20% de los contagiados requerirán ingresos a hospitales y entre el 5% y 10% pasarán a cuidados intensivos (UCI). En ese país el personal médico debe escoger a quién salvar, literalmente, ante la escasez antes mencionada, ya que no alcanzan los insumos para salvar a todos aquellos que ingresan. De hecho, Ochoa insistió en que están colapsadas las UCI en Madrid. Sin embargo, solo las personas que tienen neumonías graves ingresan y se les hace seguimiento; quienes presentan un deterioro respiratorio son trasladados a UCI. “Hay un momento en que le cuerpo ya no soporta”, dijo y explicó que a nivel pulmonar “hay una respuesta inflamatoria brutal, lo que hace colapsar a los pacientes”.
“Los mayores de 70 años, habitualmente, ya no tienen cabida”, dijo la anestesióloga, tratando de describir la compleja realidad que inunda los hospitales de España. En cuanto a los pacientes que ve con más recurrencia, aseguró que llegan todo tipo de personas, tanto jóvenes como mayores. “Justo anoche nos ingresó un chico de 38 años sin antecedentes. Luego, es verdad que el virus ataca más a la población masculina y hay personas más propensas a requerir un ingreso a UCI”. Por otra parte, Ochoa contó que les avisan telefónicamente a las familias sobre el estado de los pacientes en cuidados intensivos, que en varias ocasiones fallecen sedados sin despedirse de sus parientes. “Es una situación que no tiene manera de describir, incluso perdemos la humanidad”, lamentó la profesional de la salud. Luego del fallecimiento, el cadáver recibe un tratamiento distinto al usual, ya que puede seguir transmitiendo el covid-19, por lo que se los debe meter en bolsas especiales.
Ante una cuarentena prácticamente mundial y la enorme cantidad de casos y fallecimientos a causa del coronavirus en España, la salud mental es una de las cuestiones más discutidas. Evidentemente, el personal de la salud se ve muy afectado. Al respecto, la colombiana planteó que “sólo cuando pase la crisis vamos a ser conscientes de lo que mentalmente nos ha costado”. Carolina Ochoa, que está embarazada, recordó que “el problema de esta enfermedad es que tiene un espectro muy amplio de síntomas y muchas personas que se encuentran bien pueden ser transmisores”, por lo cual es posible estar transmitiéndole el virus a otras personas sin saberlo. Ella insistió en que el gobierno de Colombia tiene que afrontar la crisis sin pensar en la economía, “que fue lo que pasó aquí en la Unión Europea: se tomaron tarde las medidas por ese miedo”.