La presentadora Sara Uribe llamó la atención de sus seguidores luego de referirse a la compleja situación que atraviesa a nivel familiar. De acuerdo con su relato, su mamá generó una delicada dependencia a los medicamentos psiquiátricos.
En el espacio de Vicky en Semana, la modelo paisa abrió su corazón y expuso todos los detalles que rodean el estado de salud de su madre. Entre lágrimas, contó que el día a día de su progenitora se resume en “querer dormir” y no en “querer vivir”.
Y aunque la mujer les ha dicho que “no está haciendo nada malo”, su familia no ha podido dejar pasar la situación sin mostrar el interés que merece.
“Es verdad, no está haciendo nada malo, según ella. Ella quiere dormir, pero yo le digo a Dios: acordate de ella, si ella no quiere estar acá, acordate, pero no me la pongás a sufrir más. Es un sufrimiento para ella, pero también es un sufrimiento para toda la familia”, expresó Sara Uribe.
El proceso ha sido más que complejo. A pesar de que la presentadora internó durante un tiempo a su mamá en una clínica especializada y aún le mantiene vigilancia permanente con personal capacitado, no ha visto evolución en su condición.
“Esa mamá no está”
Sara Uribe recuerda a una mamá vital de la que no hay rastro. En sus palabras, la adicción le arrebató a su progenitora a tal punto que hoy el único tema de conversación entre las dos está enfocado, precisamente, en los medicamentos.
“No hay una conversación diferente. En sus pocos momentos de lucidez hay que cogerla y aprovecharla. A veces le da la desesperación y nos puede tratar mal, nos puede decir cosas que ya uno se acostumbra porque está enferma y hay que entender, pero uno también se cansa de esos maltratos”.
Respecto a los momentos de lucidez que esporádicamente tiene su mamá, Sara Uribe comentó que duran el tiempo que permanezca sin consumir fármacos, sin embargo, su condición luego se complica. “El sistema nervioso central empieza a descontrolarse de una manera increíble, empiezan a tener ese síndrome de abstinencia que es una cosa absurda, empiezan a sudar, a ver alucinaciones, tiene que dormir con la luz prendida, caminan toda la noche (…). Tiene el sistema bipolar afectivo, entonces, un día nos pueden amar como el otro día nos pueden odiar”.
Finalmente, la modelo confesó que su mamá no le deja muchas opciones. Si la llama para pedirle medicamentos y por alguna razón no se los suministra, puede llegar al punto de conseguirlos por sus propios medios.
“Puede llegar a un punto en que llame a una vecina y decirle, ‘Sara es muy mala y no me manda medicina para el dolor’, y la vecina se va a apiadar de ella”, redondeó en el espacio de Vicky en Semana.