La propuesta del sin IVA por parte del actual gobierno, bajo el mandato del presidente Gustavo Petro, cambió en comparación con lo que se tenía previsto. Entre las trasformaciones, solo habrá dos días con esta iniciativa, además la venta y compra será para productos nacionales.

Para abordar el tema, en Vicky en Semana habló el presidente de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), Jaime Alberto Cabal, e inició diciendo que los días sin IVA han sido beneficiosos para el país. Además, dio a conocer su punto de vista en relación con las nuevas variaciones.

En primera medida, el ingeniero industrial explicó que Fenalco fue líder para trasformar los días sin IVA. Se reunieron con el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, y aparte de justificar que esta iniciativa es importante para el comercio, la industria y los compradores, quienes han podido acceder a tener diferentes productos con el 19 % de descuento, Cabal contó que buscaron mostrar que el esfuerzo fiscal no era como se pensaba; “sino que se compensaba con las ventas de productos con IVA que jalonaba el gobierno”.

De acuerdo con la cabeza de uno de los gremios comerciales más grandes en el país, se argumentó que el día sin IVA favorecía a los productos importados, entonces se pudo demostrar que hay un gran componente de producción nacional.

Por lo tanto, para salvar estos días exentos del IVA, se propuso la transformación de la importante iniciativa para el comercio, aunque no se puede comprar tecnología, electrodomésticos, juguetes importados, ya que los productos deben ser producidos en Colombia

“Creemos que es una buena oportunidad mantener los días y, mucho mejor, dos días hacia la producción nacional, que desaparecer los tres días, como lo decía la propuesta radicada de la reforma tributaria en el Congreso de la República”, precisó Jaime Alberto Cabal.

¿Cuánto puede representar en ventas?

El presidente de Fenalco compartió que en el esquema anterior, al haber productos importados dentro de los días sin IVA, las ganancias ascendieron a los diez billones de pesos y el 30 % eran productos importados, en comparación con un 70 % de producción nacional.

“Creemos que si bien es cierto no alcanzaríamos a llegar a los diez billones, porque hay un componente de venta alto de tecnología que ya no estará -celulares, computadores, televisores, tabletas, entre otros-, seguramente sí se van a alcanzar los 7 u 8 billones en esta oportunidad”, analizó Cabal.

Los cambios del Día sin IVA

El ingeniero industrial explicó que la compra de tecnología desaparece; los electrodomésticos seguirán, pero con la línea colombiana, como Challenger, Mabe, Haceb, pero marcas como LG o Samsung, líderes en el mercado, no se podrán comprar con el descuento del 19 %.

En cuanto a confección y calzado, se tiene en cuenta la misma exigencia y es que deben ser productos nacionales, lo mismo sucede con el componente de la juguetería.

“La buena noticia es que hemos planteado en la solicitud que se incorporen otros productos que son de fabricación nacional y de productores, especialmente pequeños y medianos, como lo son muebles, colchones, decoración del hogar, artesanías, entre otros, para estimular la producción nacional”, compartió el líder de Fenalco.

Por otro lado, ha incrementado una preocupación de que las nuevas consideraciones del día sin IVA podrían llegar a tambalear.

El comerciante dijo que es posible que se dé una alerta por “discriminación de productos importados, pero ese es un tema para mirar con lupa jurídica. Es cierto que los países en determinados momentos y esporádicamente, dos días al año, pueden direccionar algunas políticas para estimular segmentos de la población”, así que Cabal no cree que haya complicaciones, siempre y cuando no sea una medida permanente por discriminación prolongada.

Qué está pasando con las grandes industrias

El presidente de Fenalco detalló que la gran mayoría de ventas en el país es de origen nacional y para el caso de las grandes importadoras, en muchas superficies el componente colombiano es de más del 50 %. Para ellos, se supone que la venta será efectiva.

En otras grandes superficies, el componente de importación tiene mayores niveles, entonces es cuando aparece la preocupación. Sin embargo, el hombre mantiene la postura de que es mejor contener la iniciativa, con los cambios, a que desaparezca.

“Yo creo que los colombianos se apropiaron del día sin IVA y, para la gran mayoría, sería muy doloroso que le quitarán esta oportunidad”, precisó.

Para el próximo año, las proyecciones económicas en el país apuntan a que será una situación difícil. Por lo tanto, Jaime Alberto Cabal, comentó en Vicky en Semana que hay que aterrizar sobre la realidad que se espera, “así que al ser producción nacional los productores de la industria también se van a favorecer y, de esa manera, la cadena productiva que jalona el comercio. Mucho más si será época productiva de vacas flacas y no gordas, como ha sucedido en este primer semestre del año”.

¿Y los tenderos?

Se ha dado a conocer que el gremio tendero del país tiene planeado llevar a cabo una protesta. Respecto a este tema, el presidente de Fenalco dijo que este colectivo les ha pedido apoyo para hablar y manifestarse en el Congreso de la República y, según lo previsto, eso sucederá este martes 4 de octubre.

El tema a discusión será, principalmente, del impuesto a bebidas y productos procesados; ya que se volvería para los tenderos un extracosto que llegaría directamente al consumidor, lo que conduce a que se puedan deprimir las ventas.

Sumado a esto, otro factor que expuso Cabal es que de acuerdo con un estudio de la Federación Nacional de Comerciantes, el 90 % de las tiendas de barrio se ubican en los estratos 1, 2 y 3. Al pertenecer a estos sectores, esta población sería la más perjudicada porque los productos con el impuesto representan el 70 % de las ventas de las tiendas, además de que son los de mayor rentabilidad.

“El gobierno en algunos alimentos ha reconsiderado la medida, pero no en las bebidas azucaradas que subirían $ 200 o $ 300. En los productos procesados, la lista se está definiendo. (...) Nuestro planteamiento es que de todas maneras; primero, que esta iniciativa se debería eliminar; segundo, si no es así, que no tenga un impacto tan fuerte al comercio sino progresivo; tercero, que ojalá se pueda discriminar o direccionar que las ventas a las tiendas de barrio no tengan este impuesto, sino que sea para establecimientos que sí lo puedan hacer. Hay que cuidar las tiendas de barrio porque representan el 48 % del abastecimiento”, concluyó el presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal.