“Yo no hubiera nombrado al hijo de Jorge 40 como coordinador de víctimas”. Con esas palabras, la senadora del Centro Democrático, Paloma Valencia, rechazó el nombramiento que hizo el Gobierno nacional del abogado Jorge Tovar Vélez como director para la Atención de Víctimas, en el Ministerio del Interior. Un nombramiento que ha despertado la indignación de varios sectores porque se trata del hijo del exparamilitar Rodrigo Tovar Pupo, alias ‘Jorge 40’, exparamilitar responsable de centenares de crímenes y hoy extraditado a los Estados Unidos.
“Pero sí creo que es un mensaje positivo”, añadió la legisladora, en el sentido de explicar que los hijos de criminales no pueden cargar con las culpas de sus padres. “Ahí hay un tema mucho más grave -–continuó Valencia-- y es que los máximos responsables de crímenes de guerra sí sean nombrados en el Congreso”, dijo, refiriéndose a la presencia de los miembros del hoy partido Farc tanto en el Senado como en la Cámara de Representantes, producto del acuerdo de paz.
La congresista fue más allá, e incluso, mencionó el caso de María José Pizarro, hoy con una curul en la Cámara baja, al recordar que es hija del exguerrillero del M-19, Carlos Pizarro. Y aunque dijo que “no defiendo paramilitares ni defiendo a nadie que se haya alzado en armas contra los colombianos, sí me llama la atención que a la izquierda le parece gravísimo el hijo de Jorge Tovar, pero no le parece politizada una justicia donde están la esposa de Iván Cepeda y militantes de las Farc. Eso sí está bien”, señaló, refiriéndose a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).
El periodista y líder de Voces del Secuestro, Herbin Hoyos, consideró por su parte que este nombramiento se pudo establecer para “limar asperezas” con sectores que hayan tenido relaciones con miembros de grupos al margen de la ley. Según Hoyos, “el Gobierno no debería correr estos riesgos de poner personas que generen estos ruidos”. Dijo, además, que “habrá que ver” si resiste estar en ese cargo ya que, según él, va a tener muchas presiones.
Hoyos también sugirió que se hiciera un pacto mediante el cual ninguna persona con familiares que hayan tenido vínculos con el conflicto pertenezca a la administración pública. Entre tanto, la senadora del Centro Democrático, María del Rosario Guerra, se unió a la opinión de Valencia. “Me parece innecesario, si el muchacho es bueno y le iba bien como asesor en el Ministerio del Interior, lo hubieran dejado ahí”. Consideró que este nombramiento puede hacerle daño al Gobierno. “Es desafortunado”, concluyó.