Jamundí (Valle del Cauca) está azotado por la violencia. El domingo pasado se reportó que cinco personas fueron asesinadas, entre ellas un concejal y un cantante de música popular, en dos hechos distintos entre la noche del viernes y el sábado en Jamundí (Valle del Cauca) y Corinto (Cauca).
En la tarde del sábado, el concejal Jhon Fredy Gil fue baleado en Jamundí. “Este es un hecho cobarde que atenta contra la democracia y nuestras instituciones”, informó la alcaldía del municipio en la red social X. El político de izquierda, perteneciente al partido indígena MAIS, recibió una docena de disparos cuando estaba en un restaurante. Antes de ser concejal, Gil fue vocero de una agrupación de campesinos cultivadores de hoja de coca, marihuana y amapola.
La gobernadora de Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, aseguró que tres concejales han sido asesinados allí este año y pidió medidas de protección para la alcaldesa de Jamundí, quien ha recibido amenazas de muerte.
Por su parte, el músico Sebastián Muñoz falleció junto a su DJ cuando fueron atacados a tiros en el municipio de Corinto, en el departamento del Cauca. En los mismos hechos, murieron otras dos personas, según precisó Miller Hurtado, secretario departamental de Seguridad. Las autoridades iniciaron una investigación por los asesinatos. Muñoz estaba en el lugar contratado para dar un concierto privado, según una publicación en Instagram de su equipo de trabajo.
Y este martes, Jamundí de nuevo está azotado por los violentos. Una fuerte explosión se registró en la mañana de este miércoles en el parque principal del municipio. Lo que se conoce hasta el momento es que la motocicleta fue cargada con artefactos explosivos y detonada hacia las 6:50 de la mañana en una esquina del parque principal del municipio, donde funcionan varias sedes bancarias, incluida Bancolombia y AVVillas, lugar que a esa hora es muy transitado.
En el segundo piso de este lugar opera un gimnasio que también resultó afectado, así como un CAI móvil de la Policía que se encontraba en ese sector. “No creemos que haya sido un ataque contra Bancolombia, porque también está afectada la sede del banco AV Villas”, le confirmó una fuente de las autoridades a SEMANA. La principal hipótesis es que el ataque estaba dirigido contra el CAI móvil de la Policía. Por ahora, las autoridades están haciendo un barrido para saber el número de heridos, preliminarmente SEMANA conoció que dos uniformados e igual número de civiles resultaron lesionados.
Cauca y Valle del Cauca son departamentos clave para los actores irregulares en Colombia. Allí operan disidencias de esa organización que continúan traficando cocaína, así como otros grupos del narcotráfico. Es una zona estratégica “en una guerra de guerrillas”, según describió Duvalier Sánchez, representante a la Cámara por la Alianza Verde, en debate que adelantó con Christian Garcés, homólogo suyo perteneciente al Centro Democrático y el mayor retirao Jorge Castillo, analista de inteligencia.
Garcés, a su turno, dijo que Sánchez tiene responsabilidad en lo ocurrido porque él, dijo, hizo parte de esa administración cuando salió la denuncia de SEMANA. ¿Cuál denuncia? El 2 de marzo pasado, este medio denunció que “el señor Jaime es el bloque guerrillero que ha fundado una república independiente en las narices de las autoridades y de la fuerza pública en Cali: ellos son la ley, el dios que decide sobre la vida, la mano que provee y quita. Son los todopoderosos. Como en las peores épocas de los carteles del narcotráfico, tienen dos estaciones de gasolina con instalaciones modernas. Las estructuras están ubicadas en La Liberia y La Cabaña. El carrotanque del combustible es el único que tiene permiso para transitar en esas zonas, los demás automotores pesados son robados, quemados o baleados”.
De acuerdo con Garcés, Sánchez, como secretario general de la Alcaldía de Jamundí, permitió que las estaciones de servicio quedaran a órdenes del narcotráfico. Sánchez le respondió que fue contratista, no secretario general. “Usted me va a hacer matar, Christian, no siga con eso, humanamente se lo pido”.
Esta gasolina, mayoritariamente, es usada para mover la maquinaria que está abriendo paso en la carretera que las Farc están construyendo para conectar con el Naya y el Pacífico, arrasando con la zona de reserva de los Farallones de Cali. Los criminales están tan seguros de que están en terreno propio y nada les pasará, que atienden las gasolineras vestidas con uniformes de las Farc y con fusiles.
Los vehículos tienen que transitar con los vidrios abajo y los motociclistas no pueden usar cascos. Todo eso está expuesto en el manual de “buen comportamiento” que reparten a la comunidad. Este panorama fue el que motivó los señalamientos entre los representantes. “Tú eres un payaso”, dijo Sánchez a Garcés. Al margen de estos hechos, el presidente Gustavo Petro adelanta gira por Europa y, ahora mismo, está en Suecia.
“La EMC del Cauca y el Valle vuelven a hacer lo que saben hacer: Matar gente humilde del pueblo. Su camino la codicia para lo cual no les importa la destrucción de las comunidades. El EMC es una fuerza hostil al pueblo. El Ejército debe culminar la ofensiva en el cañón del Micay”, escribió en X desde el Viejo Continente.