Después de elegir a Iván Name como presidente del Congreso, la plenaria del Senado escogió a los dos vicepresidentes que estarán en las dignidades hasta el 20 de julio de 2024. En la primera vicepresidencia estará la senadora del Pacto Histórico, María José Pizarro, y en la segunda vicepresidencia, el senador Didier Lobo, de Cambio Radical.
En el espacio de Vicky en SEMANA, la senadora Pizarro reaccionó a su elección y dio detalles sobre el papel que desempeñará, precisamente, desde la primera vicepresidencia del Senado.
Para empezar, la congresista indicó que existía una “cierta y relativa tranquilidad con el cupo que le correspondía al Pacto Histórico en la vicepresidencia del Senado de la República”. No obstante, anotó que también existió tensión frente a lo ocurrido con la presidencia del Legislativo.
“Llega a la presidencia Iván Name, que es senador del Partido Verde, uno de los partidos del Gobierno. Y yo, por supuesto, estaré allí representando los intereses del Gobierno y representando los proyectos que para nosotros son prioritarios”, manifestó Pizarro.
Alrededor de la instalación del Congreso para el nuevo periodo legislativo también ha surgido el debate respecto a la paridad de género. Sin embargo, la única mujer dentro de las mesas directivas resultó siendo, precisamente, María José Pizarro. De igual manera, parece que la presencia femenina dentro de las comisiones constitucionales tampoco será predominante.
“En el Senado de la República sucedió algo que para quienes defendemos los derechos de las mujeres nos genera no solamente alerta, sino cierto malestar. Según establece el estatuto de la oposición —y voy a empezar por la segunda vicepresidencia— tiene que haber alternancia de género y partido. El Partido Cambio Radical tiene una mujer, Ana María Castañeda (...). Si uno sigue a rajatabla el artículo, estaba claro, ella debió ser quien asumiera la segunda vicepresidencia. Sin embargo, ellos hacen un análisis que presenta el senador Motoa en relación que la misma senadora decide irse al cuarto año para garantizar que el Centro Democrático, el próximo año, pueda existir una mujer. Pero de facto tampoco se entiende”, resumió Pizarro en el espacio de Vicky en SEMANA.
En síntesis, la congresista del Pacto Histórico argumentó que las mujeres han sido “excluidas de los escenarios de poder”. “Hemos sido discriminadas en la vida social, y por lo tanto hemos luchado”, anotó.
Frente a esta realidad, María José Pizarro dijo que no se sintió en riesgo, aunque sí experimentó varios sinsabores en el marco de la reciente instalación del Congreso de la República.
Reacción a la derrota de Angélica Lozano en el Congreso
La senadora Angélica Lozano se perfilaba como la mujer que iba a asumir la presidencia del Senado. De hecho, según sus cuentas, el nombramiento estaba prácticamente listo. Al final, fue Iván Name el elegido.
“Ambos son congresistas con experiencia que han construido su camino propio en el Congreso de la República. Mi sinsabor queda porque hubiese sido inédito en la historia de nuestro país que, por primera vez, el Senado de la República o una mesa directiva en el Congreso hubiese sido presidida por tres mujeres”, expuso Pizarro.
Aunque todavía no ha tenido la oportunidad de hablar a profundidad con Angélica Lozano sobre el tema, María José Pizarro hizo una lectura preliminar sobre lo ocurrido: “Ella no obtuvo los votos necesarios para ganar la Presidencia del Senado, y eso cualquier persona que esté aspirando a una dignidad de este tipo lo siente, y lo siente de manera personal”.
“Yo creo que ella estará en la reflexión a ver qué pudo haber fallado, pero yo sé que Angélica es una mujer madura, con cancha en el Congreso de la República y que tiene todo un camino político por delante. Mis consideraciones son más en el sentido de poder haber hecho equipo con una mujer (...). Ahora tengo el reto de poder construir con el senador Iván Name, la cual hasta ahora ha sido cordial”, concluyó María José Pizarro en el espacio de Vicky en SEMANA.