La sanción de la Ley de fortalecimiento de seguridad ciudadana ha causado una gran polémica en Colombia, en la que actúan dos grandes bandos: aquellos que defienden la ley porque representa una opción para que los ciudadanos accedan a la legítima defensa en el país y otros que critican que esta iniciativa vaya a revivir el pasado paramilitar, debido a que, según ellos, cualquiera puede matar a otra persona acusando ‘legitimidad de defensa’.
“Esto responde a las inquietudes y preocupaciones de los ciudadanos frente a las acciones de todas las organizaciones de delincuencia. Esta ley contiene aspectos muy importantes en reformas al Código Penal, al de Procedimiento Penal, el Código Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana, el Código Nacional de Tránsito y el Código Nacional Penitenciario”, explicó el ministro de Justicia, Wilson Ruiz.
Para hablar del tema, en Vicky en Semana estuvieron Edward Rodríguez, representante a la Cámara por el Centro Democrático y ponente de esta ley, y Antonio Sanguino, senador de la Alianza Verde, quienes protagonizaron un caluroso debate, cada uno defendiendo su punto de vista frente a esta nueva ley de seguridad para los ciudadanos.
“A mí me parece que con esta ley se está buscando la fiebre en las sábanas”, dijo Sanguino, asegurando que esto es un populismo penal, pues no se centra en la búsqueda de una verdadera justicia, sino en ‘paños de agua tibia’, lo que además “atenta contra la protesta social” en Colombia.
En respuesta, Rodríguez explicó: “Lo que hicimos fue adecuar y dar una herramienta fuerte para el que la haga la pague”, ya que, según el representante, lo que se intenta es poder dejar en la cárcel al ladrón del celular, al asesino de líderes sociales, al abusador de niños, aumentando penas y fortaleciendo la defensa del ciudadano frente a este tipo de casos.
“Nosotros le dimos el 3 % del presupuesto a la justicia y hemos avanzado en el desarrollo de la justicia digital. Yo sí estoy feliz porque el rompevidrios, el que sacaba el cuchillo, el ladrón, sí irán a la cárcel. Es que yo trabajo es en las calles”, añadió.
Asimismo, el congresista del Centro Democrático dijo: “Más se demoraba la Policía en coger al ladrón, que el juez dejarlo en libertad (…). Los atracadores se burlaban de la Policía, la víctima y la justicia, pero ahora se les acabó el jueguito”.
Sin embargo, Sanguino acusó nuevamente que se va a penalizar de igual forma al asesino con el manifestante, pues se está cruzando a los delincuentes con los marchantes; según él, la ley de seguridad ciudadana considera que, incluso, el uso de un tapabocas (ya que tapa la cara) podría ser causal para ser detenido por la Policía.
“Yo no estoy a favor del delincuente, yo estoy a favor de la ciudadanía. El hecho de que tenga una visión diferente a la tuya [refiriéndose a Edward] no quiere decir que apoye al ladrón (...). Yo también defiendo a los ciudadanos y a la protesta social”, agregó Sanguino.
En contraste, Edward Rodríguez dijo que la ley de seguridad ciudadana no ataca a los manifestantes, sino los actos vandálicos que estos puedan cometer. “Lea bien la letra menuda de la ley, senador”, le recriminó a Sanguino.
En cuanto a la legítima defensa, Rodríguez aseguró que “es para aclarar y beneficiar a la ciudadanía”, pero no para tomar justicia por mano propia, pues se deberá demostrar que el ataque del ciudadano es equilibrado al ejecutado por el supuesto delincuente.
“Usted no le puede disparar 20 veces a una persona. Eso ya es desequilibrado y debería considerarse un homicidio”, indicó.
“El uso de la legítima defensa ha terminado en el uso de la legítima ¡autodefensa!”, fue la respuesta de Sanguino, recordando el caso de Andrés Escobar, el ciudadano que fue captado con un arma, disparando en contra de los manifestantes durante el Paro Nacional de 2021 en Cali.
“Es que la ley no indica que es por un robo o un ataque”, explicó el senador del Partido Verde, insinuando que la ley ofrece un libertinaje para que cualquier persona ataque a un manifestante acusando “una legítima defensa”.
También se habló de la regularización del uso de armas traumáticas, en la que ambos personajes dijeron estar de acuerdo, aunque Sanguino añadió que en Colombia no solo deberían estar reguladas este tipo de armas, sino todo el monopolio que existe hoy en día en el país (de fuego o armas blancas). Para el senador, lo ideal es que el uso de armas sea exclusivo del Estado y las fuerzas públicas colombianas.
En respuesta, Rodríguez no mencionó su punto de vista frente al porte ilegal de armas, tal y como planteó el tema Sanguino, pero sí habló de que la ley en todo momento está obedeciendo lo dicho por la Corte Interamericana de Derechos Humanos; esto, según él, asegura una clara y efectiva defensa del ciudadano con base en las leyes internacionales.
“Esta ley está hecha es para los delincuentes y eso es un punto muy importante. Esta es una excelente ley, que está hecha para el cuidado de los ciudadanos y para que nuestros jueces y fiscales puedan aplicar claramente la ley beneficiando a los ciudadanos y no a los delincuentes”, fue el mensaje final de Edward Rodríguez, mientras que Antonio Sanguino no se quiso ir sin lanzar una ‘pulla’ contra el presidente Iván Duque.
“Pedirle al presidente de la República, Iván Duque, que en su propio palacio, en el Palacio de Nariño, aplique eso de “el que la hace la paga”, sobre todo con estos escándalos de corrupción y de contratación que hemos escuchado en los últimos días”, concluyó el senador de la Alianza Verde.