El exvicepresidente Francisco Santos habló con Vicky en SEMANA. En el marco de la entrevista, para analizar el discurso del mandatario en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Nueva York (Estados Unidos), el también exembajador de Colombia en Estados Unidos aseguró que el gobierno del presidente Gustavo Petro tiende a culpar a la administración pasada para justificar las decisiones que toma. Ejemplo de ello, la polémica alrededor de las alzas en el precio de la gasolina.
“El 26 salgamos, es la primera de muchas protestas que nos va a tocar, algunas van a ser difíciles y violentas. Pero, lo que empieza el 26 es la recuperación de la institucionalidad porque lo que está pasando es que en un mes nos están destruyendo instituciones fundamentales como la policía y el Ejército. Están destruyendo políticas críticas para la libertad, la democracia y para el libre albedrio de los colombianos como es la lucha contra las drogas y están creando una situación de crisis que el presidente quiere crear con su ministro de Defensa, con su ministra de Salud, para radicalizar la agenda y así para que acabemos como acabó Venezuela”, aseguró el exdiplomático.
“Los colombianos de bien tenemos que prepararnos para la batalla que viene, sin dilación, de una. Y Petro dice: ‘Es que ellos son los culpables’. No, el culpable es él porque instigó la violencia cuando estuvo en el monte y después cuando fue político, él es el culpable y él va a tener que responder por la creación de esta nueva guerra civil que está generando y por la creación de nuevos grupos paramilitares”, agregó el exembajador Francisco Santos.
En conversación con los medios de comunicación en Estados Unidos, donde viajó el pasado 18 de septiembre para participar en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el presidente Petro expresó que respeta las jornadas de protesta social, aunque resaltó que las medidas que afectarán el bolsillo del colombiano obedecen a las decisiones tomadas por el gobierno de Iván Duque. “Están en su derecho, el problema es que ellos ocasionaron el problema”, comentó el jefe de Estado colombiano sin mencionar al uribismo, aunque dejando entrever que se refería a él.
Y es que la polémica desatada por el presidente Gustavo Petro con la propuesta de eliminar los subsidios a la gasolina, hecho que podría dejar el galón del combustible cercano a los 16.000 pesos, no para de generar controversia en el país. Si bien desde los sectores de oposición han salido a criticar esta propuesta al considerar que podría afectar directamente el consumo de los ciudadanos, desde el petrismo han argumentado que esto obedece al “déficit” que dejó el gobierno de Iván Duque.
Ante el creciente déficit del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (Fepec), el cual asciende a 10 billones de pesos por trimestre, el presidente Petro hizo una reflexión desde su cuenta de Twitter, pues este es un hueco que cada vez les cuesta más a las finanzas públicas y que además muchos expertos califican como insostenible.
Petro aseguró que los casi 40 billones anuales que alcanza el déficit del Fepec (el cual busca evitar que el alza internacional de los precios del petróleo impacte demasiado el costo interno de la gasolina), es casi la mitad del déficit del presupuesto nacional y que, por ende, vale la pena debatir si es conveniente seguir con ese subsidio. En su reflexión, el presidente Petro también dijo que ese subsidio creciente al consumo de gasolina es muy costoso, por lo cual es hora de un debate nacional sobre: “¿Vale la pena subsidiar la gasolina por 40 billones cuando la tasa de mortalidad infantil por desnutrición se duplica?”.
Agregó que “la otra cara de no subir la gasolina y aumentar el déficit del fondo es dejar aumentar el hambre y la pobreza en Colombia”. Por eso, le propone al Congreso desligar el cobro de impuestos a la gasolina de la indexación del precio de esta para mitigar el impacto sobre el consumidor. Por cuenta de esta y otras políticas adoptadas por el Gobierno, sectores ciudadanos están convocando a una marcha para el 26 de septiembre de 2022.