El miércoles 2 de noviembre se aprobó la reforma tributaria del gobierno de Gustavo Petro en el Senado. En un candente debate, el articulado acogió modificaciones específicas frente a ciertos temas, sin embargo, se mantuvo en otros puntos que han causado descontento en algunos sectores.
En Vicky en Semana, el representante Alejandro Carlos Chacón, del Partido Liberal, advirtió que al ciudadano “le van a subir las tarifas de los alimentos porque todo de le va a gravar”. Por ejemplo, citó productos como el café, el té y preparaciones a base de café y extractos.
“Agua, incluidas el agua mineral y la gaseada, con adiciones que puedan tener o no de azúcar en estos productos”, siguió mencionando Chacón. Sin embargo, la senadora del Pacto Histórico Clara López Obregón intervino y señaló que su contertulio estaba confundiendo a la gente.
“Te recuerdo que todo eso fue lo que cambió, para que quedara aclarado que las aguas eran solo las que tenían azúcar añadida y no el agua soda o mineral (...). No estaba gravado porque no habíamos aprobado ninguna reforma, la discutimos y la mejoramos”, expuso López Obregón. Aún así, para Chacón resultó inaceptable que una ponencia “tuviera solo la intención de gravar a las personas el agua”.
Se sacó el pan, pero se mantuvieron productos de pastelería
En su lectura de lo aprobado en la reforma tributaria, el representante liberal planteó un ejercicio: “A las natas póngale un edulcorante o el azúcar, con eso ya quedó gravado. Y en esto entran preparaciones de productos de panadería, usted saca el pan, pero preparaciones de productos de panadería, pastelería y galletería quedaron gravados. Eso no se excluyó”, afirmó Chacón.
Esta aclaración fue aceptada por la senadora Clara López, sin embargo, invitó a no confundir a los ciudadanos mencionando otros productos que, en definitiva, no quedaron gravados con la reforma.
Enseguida, Chacón continuó con sus críticas: “Embutidos y productos de carne, no es solo el chorizo y el jamón (...). Yo no puedo estar de acuerdo que voten para gravar los cereales, esto es gravar el alimento así no se quiera decir. Todo lo que sean productos como tal que contengan sal (sodio), esto no son 60 ni 70 productos, es todo lo que tenga esos componentes. Por eso, de manera personal, yo me opuse a que gravaran ese tipo de alimentos, me parece que ahí van es a perjudicar a la gente de a pie”.
“No me parece que vayamos a tener un impacto grande”
El representante Chacón insistió en que quienes terminarán asumiendo el peso de los nuevos impuestos son los consumidores. En contraste, la senadora Clara López Obregón dibujó cuál sería el escenario venidero cuando se implemente el nuevo modelo de tributación en esta materia.
“Se hizo un estudio con el índice de consumidores del Dane para ver qué impacto inflacionario podría tener este impuesto que se le cobra es a los productores de esos alimentos, no a los tenderos, y el cálculo que dijo el ministro de Hacienda es que no alcanzaba a llegar al 0,3 %. Y con todos los productos que se sacaron en la discusión, gracias a las claridades de los colegas, ese pequeño porcentaje se reduce aún más. Se puede hacer mucho tremendismo, pero la realidad es que el Índice de Precios al Consumidor marca toda la canasta familiar, y esta no se gravó toda; se gravaron unos elementos (...). No me parece que vayamos a tener un impacto grande”, explicó la senadora del Pacto Histórico.
A su turno, el representante Óscar Darío Pérez, del Centro Democrático, citó estudios referentes al impacto que tendrían los denominados “impuestos saludables”, así como la utilización de plásticos de un solo uso.
“Hay algunos estudios que establecen que eso es equivalente a que la inflación para la población que los consume, que son los más pobres de Colombia en un altísimo porcentaje -más de 90 %-, hubiera sido de dos puntos más (...). Uno es el impacto en la canasta familiar completa, otro es el impacto en los productos específicamente considerados, y otro es el impacto entre el uno y el otro, incluyéndole los plásticos de un solo uso”, puntualizó Pérez.
A su vez, respondió al argumento de Clara López, quien dijo que el impuesto será para los productores. ”Eso suena bonito, pero eso termina al otro día en manos de los consumidores. Los que producen no lo van a descontar de sus márgenes de utilidad; se lo van a trasladar a los contribuyentes”, comentó.