José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán, aceptó la invitación del presidente Gustavo Petro para ser parte del equipo negociador del Gobierno en los diálogos de paz con el ELN. La presencia del líder gremial en la mesa, sin duda, era inesperada y causó gran sorpresa de cara a la reactivación de las conversaciones.
En el espacio de Vicky en SEMANA, la senadora María Fernanda Cabal reveló cómo impactó a nivel familiar la vinculación de su esposo, José Félix Lafaurie, a la mesa de diálogo.
Por ejemplo, Juan José Lafaurie, hijo de Cabal y del líder gremial, ha ganado popularidad en redes sociales a raíz de las opiniones que constantemente publica en su cuenta de Twitter. Siguiendo un comportamiento similar al de su madre, el joven suele expresarse sin ningún tipo de filtro, manifestando –entre otras cosas– su oposición frente al gobierno de turno.
En esa línea, su reacción ante la vinculación de José Félix Lafaurie a la mesa de diálogo no resultó sencilla. Así lo confesó María Fernanda Cabal: “Totalmente en desacuerdo. Yo pienso que él (Juan José) es quien tiene una postura mucho más fuerte. Él siente, como hijo, que su papá ha sido un modelo en mucho de lo que ellos han aprendido, un papá trabajador, ahorrador, que les ha dicho que lo más importante es que se formen y eduquen, por los desafíos de la vida. Un papá que ha sido con ellos inmensamente cariñoso, a pesar de ser un hombre tan templado y tan temperamental”.
Sin embargo, para Juan José no fue fácil aceptar que su padre se sumara al equipo negociador con el ELN y terminara aceptando la invitación del presidente Petro. “Él sintió como que esa imagen, de alguna manera, se le diluía. Y para un hijo, una imagen de un padre es parte de su formación”, comentó Cabal.
“Tenemos que conversar, eso no es así”, le dijo Juan José Lafaurie a su padre, por lo que aún tienen pendiente una charla entre padre e hijo, según dejó ver la senadora del Centro Democrático.
ELN, “primero en la escala del mal”
Durante la entrevista con Vicky en SEMANA, Cabal hizo énfasis en un riesgo clave: “se pretende negociar con un grupo terrorista que tiene una condición distinta a los demás grupos”.
Según explicó la senadora, “habiendo sido las Farc el laboratorio de guerra –el útero de donde salen los demás grupos–”, el ELN es el grupo que, a su juicio, está en “un nivel de maldad superior”. En resumen, lo definió como un grupo terrorista, a pesar de que su esposo José Félix Lafaurie ahora hace parte del equipo negociador.
“Eso no le quita su condición de terrorista, sus acciones son terroristas (...). Aquí nos han construido la narrativa sobre nuestra propia vida. A las mismas víctimas se las ha construido la izquierda –que es experta en crear mitos y leyendas– porque no resiste la veracidad de los hechos”, anotó.
De manera general, la senadora reseñó que hoy todos estos grupos (EPL, ELN, disidencias, Nueva Marquetalia, Clan del Golfo, etc.), prácticamente, entran en la misma bolsa: la del narcotráfico. Adicionalmente, afirmó que utilizan el terrorismo, el asesinato de militares, policías y civiles.
“Pero como los elenos tienen una investidura, creada por la izquierda y la ONG, lavándoles la cara a estos degenerados y bandidos, entonces, al ELN se le da estatus político”, criticó Cabal.
En tal virtud, la convicción de la senadora es categórica: “El ELN es un grupo terrorista que, en la escala del mal, puede estar de primero”, puntualizó la congresista. En seguida, argumentó que dicha organización tiene la capacidad de “retorcer y distorsionar el evangelio y la historia de las escrituras para vendernos su revolución”.
Finalmente, a los optimistas que confían en un final feliz con estos diálogos –reforzando el discurso de ‘paz total’ promovido por el presidente de la República–, la senadora del Centro Democrático indicó que las circunstancias están dadas para “legitimar su barbarie y que se queden en el poder, porque el ELN está gobernando hoy con Petro”.
“En el gobierno de Petro hay personajes muy afines ideológicamente al ELN. Yo no sé si serán parte de su estructura, pero muy afines. El alto comisionado de Paz, Danilo Rueda, es el apéndice del cura Javier Giraldo. Habría que ver todas las barbaridades que han escrito a través de su ONG mentirosa que se llama Comisión Intereclesial de Justicia y Paz (...). También está la señora Gloria Flórez, muy afín con su ONG Minga”, concluyó.