Uno de los mayores retos que enfrenta la población joven es conseguir trabajo, una vez culminan sus estudios universitarios. De hecho, de acuerdo con el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), el 11,2 % de los hombres con título de pregrado están desvinculados laboralmente, mientras que, para el caso de las mujeres, sube dos puntos a 13,2 %.

Por otro lado, según la misma entidad, la tasa de desempleo juvenil se incrementó al 17,7 % entre abril y junio de 2024, un panorama que, entre varias causas, podría obedecer a la desconexión entre la formación que reciben los jóvenes en las universidades y las demandas empresariales.

En ese sentido, ¿cómo lograr que las instituciones de educación superior respondan cada vez más a las dinámicas del sector productivo? Frente a esta pregunta surgen propuestas disruptivas e innovadoras como la de la Fundación Universitaria Compensar, que a través del modelo universidad-empresa fomenta la cooperación entre el mundo académico y el empresarial para que, durante el proceso formativo, los estudiantes puedan aplicar lo aprendido en distintas organizaciones, aumentando las posibilidades de que puedan emplearse, incluso antes de recibir su título.

Margarita Áñez Sampedro, rectora de la Fundación Universitaria Compensar | Foto: Cortesía Fundación Universitaria Compensar

Margarita Áñez Sampedro, rectora de la institución, explicó que la apuesta educativa diferencial de la UCompensar trasciende las aulas de clase para, desde la academia, impactar positivamente en la productividad empresarial y, por lo tanto, en el desarrollo económico nacional.

“Hoy estamos preparando a 9.200 jóvenes en 70 programas diferentes, que abarcan desde la educación técnica y tecnológica hasta la profesional y especializada, para dar una respuesta muy rápida a las necesidades reales del mercado”, explicó la directiva.

Del total de estudiantes que actualmente tiene la institución, el 46 % están en modalidad presencial en Bogotá (4.217), el 49 % en la virtualidad (4.481) y el 6 % en el departamento del Meta (509), cifras que incluyen a 1.848 personas que cursan programas de educación continuada y 196 en técnicas laborales.

Mariana González, de 20 años, es el claro ejemplo de cómo los jóvenes que asisten a la UCompensar contribuyen al desarrollo de soluciones empresariales. Está en séptimo semestre de ingeniería industrial y, desde hace tres meses, es analista de big data en una importante multinacional mexicana.

“El director de mi carrera me dijo que estaba la vacante, me postulé y poco a poco he ido avanzando. Por mi desempeño, pude viajar a la sede de la empresa en México, una experiencia que me permitió no solo conocer otro país, sino continuar fortaleciendo mis conocimientos en el campo en el que me estoy formando”, aseguró.

Además de los más de mil convenios empresariales que tiene la institución, las 105.000 empresas afiliadas a Compensar resultan ser un respaldo que amplía la capacidad de que los universitarios atiendan las demandas del sector productivo, “es una oportunidad de oro y por eso promovemos la investigación y la transferencia tecnológica, componentes cruciales para el avance de una economía basada en el conocimiento, al mismo tiempo que garantizamos que los estudiantes adquieran herramientas aplicables y pertinentes, mejorando su preparación para el mercado laboral y sus proyectos personales”, añadió Áñez Sampedro.

Investigación e innovación aplicada

Fruto del acercamiento entre la academia y las empresas, promovido gracias al modelo que promueve la fundación universitaria, se han desarrollado proyectos de innovación aplicada que han generado valor en sectores como negocios verdes, ecoturismo, transformación digital, logística en la ruralidad, entre otros. Hoy, la institución cuenta con cuatro grupos importantes de investigación, 24 semilleros y trabaja con más de 360 empresas para generar prototipos, ensayarlos en la industria, probar, fallar y aprender.

El éxito de esta estrecha relación impacta en el índice de empleabilidad de los graduados de la UCompensar, que está 14 puntos por encima del promedio nacional. “El 85 % de nuestros egresados trabajan en la disciplina para la cual estudiaron, evidenciando su gran aporte a la actividad económica del país”, advirtió la rectora.

Uno de esos egresados que se abrió campo en el mundo laboral es Sari Rosales, joven bogotana a quien la difícil situación económica de su familia la alejaba de la posibilidad de transformar su vida, a través de la educación superior.

Sari Rosales y su papá Jaro Rosales. | Foto: Semana

“Cuando apenas iba a cumplir 15 años a mi mamá le dio cáncer, entonces fueron días muy duros. Ella quería que yo entrara a la universidad, pero lo veía como algo casi inalcanzable. Ahora tengo 23, soy ingeniera de sistemas y hago parte de una de las empresas más grandes de tecnología como consultora asociada”, cuenta la joven.

A su papá, Jaro Rosales, no le cabe en el pecho la admiración que siente por su hija. “Mientras ella estudiaba su bachillerato, yo barría en una obra y lavaba en parqueaderos. No eran tiempos fáciles pues ella se iba a veces con una sola comida a estudiar y, aun así, seguía con la firme convicción de que algún día quería profesional. Mi hija lo logró, estudiando de noche y trabajando de día”, recordó emocionado.

La historia de Sari se aleja de la realidad de muchos bachilleres teniendo en cuenta que, según el Ministerio de Educación Nacional, un poco más del 60 % de 450.000 graduados de la secundaria no logra acceder a la educación superior. En su caso, además del esfuerzo y dedicación, el poder hacer un pregrado se dio gracias al Programa Becas Compensar, que subsidia el 75 % del valor de la matrícula e impacta, en promedio, a mil estudiantes cada semestre para que puedan hacer sus estudios en la UCompensar.

Durante el primer semestre de 2024, mediante dicho beneficio fueron impactados 1.005 estudiantes, en su mayoría de estratos socioeconómicos 1 y 2. Además, a 1.678 se les aplicó descuentos del 10 % por ser afiliados a Compensar, lo que representó una inversión de 501 millones de pesos.

“La UCompensar fue determinante en cumplir mi meta, no solo dándome la oportunidad de hacerme profesional, sino acercándome al mercado laboral“, aseguró Sari.

Nuevo campus

Actualmente, la Fundación Universitaria Compensar avanza en la construcción de una nueva sede de más de 27.000 metros cuadrados que abrirá sus puertas próximamente, con 15 pisos, 53 aulas modernas y 53 laboratorios. Será un nuevo campus desarrollado para fortalecer no solo la educación superior sino también la educación para el trabajo, el desarrollo humano, la formación vocacional, entre otros.

El nuevo campus de la UCompensar tendrá 15 pisos, 53 aulas modernas y 53 laboratorios. | Foto: Semana

“Estará abierto a toda la población, a los jóvenes, a los adolescentes, a los empresarios, mipymes y empresas grandes. Allí trabajaremos por la innovación para seguir aportando, desde la educación, a la productividad y al progreso de Colombia”, concluyó Margarita Áñez Sampedro, rectora de la UCompensar.