El sexto mes del año inicia con un importante descubrimiento para el medioambiente: científicos habrían encontrado la planta más grande del mundo. Así lo han informado diversos medios internacionales, los cuales han hecho eco del estudio realizado por investigadores de The University of Western Australia y publicado en la revista The Royal Society.
En este trabajo, el equipo encontró que, pese a lo que se podría creer, la planta más grande del mundo no se encuentra sobre la superficie terrestre, sino debajo del agua. De acuerdo con la explicación brindada por la institución educativa, en un video publicado en sus redes sociales oficiales, los investigadores realizaban una caracterización genética de la hierba marina en Shark Bay, una bahía ubicada en Gascoyne, en Australia Occidental.
Sin embargo, los hallazgos que encontraron fueron más que inesperados. Como precisa el estudio, que salió a la luz este miércoles 1 de junio, tras el análisis genético se pudo establecer que los pastos marinos situados bajo el agua de Shark Bay corresponden a un único tipo de organismo.
“Los investigadores inicialmente querían comprender la diversidad genética de la hierba marina en Shark Bay, pero después de generar ‘huellas dactilares’ utilizando 18.000 marcadores, descubrieron que todo coincidía”, dice el video compartido por The University of Western Australia en su Twitter.
De acuerdo con los resultados del trabajo de investigación, las muestras analizadas correspondían a una hierba marina de la especie Posidonia australis. Asimismo, el equipo científico precisó que se trataría de una planta que ha resistido por miles de años en la profundidad marina y que se extiende por cerca de 200 kilómetros.
Lo anterior resulta sorprendente y sigue siendo materia de estudio por parte de los autores del estudio, ya que la planta muestra especial resiliencia para crecer aún en condiciones volátiles como las de la zona en la que se encuentra.
“Los investigadores ahora han establecido una serie de experimentos para comprender cómo esta planta sobrevive y prospera en entornos tan típicamente ‘estresantes’”, afirman desde la institución educativa.
Al respecto, Martin Breed, coautor de la investigación, referenciado por la plataforma DW, afirmó que “esta planta puede ser estéril; no tiene sexo. Cómo sobrevivió y prosperó durante tanto tiempo es realmente desconcertante. Las plantas que no tienen sexo tienden a tener también una diversidad genética reducida, que normalmente necesitan cuando se trata de con el cambio ambiental”.
Como explican en el video, esta planta dataría de hace 4.500 años y tendría su origen en una misma semilla originada a partir de diferentes especies de pastos marinos.
«Los 200 kilómetros cuadrados existentes de praderas de malezas parecen haberse expandido a partir de una sola plántula colonizadora», aseguró la investigadora Jane Edgeloe, de la Universidad de Australia Occidental (UWA), citada por el medio ABC Sociedad.
En el apartado de discusión del artículo que se puede consultar en la revista The Royal Society, los autores también se refieren a la importancia que tiene este descubrimiento para su campo de estudio.
“Nuestros hallazgos sugieren un nuevo ejemplo significativo de poliploidía como una estrategia evolutiva exitosa que permitió una ventaja sobre los progenitores diploides y el acceso a hábitats nuevos, perturbados o más duros a medida que se desarrollaba”, precisan.
Asimismo, explicaron que “la duplicación del genoma completo asociada con la poliploidía parece haber permitido que P. australisclon para ocupar un nuevo hábitat y/o superar a los progenitores diploides dentro de Shark Bay durante los rápidos cambios en las condiciones ambientales posteriores al Último Máximo Glacial”.
“Eso es todo, solo una planta se ha expandido más de 180 km en Shark Bay, lo que la convierte en la planta más grande conocida en la Tierra”, añadió Jane Edgeloe, para la plataforma DW.