Con el propósito de proteger, conservar y garantizar la supervivencia del cangrejo negro a través de gestiones adecuadas y sostenibles, la Corporación para el Desarrollo Sostenible de San Andrés, Providencia y Santa Catalina (Coralina), inició la veda de este crustáceo en el Archipiélago.

Se trata de un crustáceo de la familia Gecarcinus ruricola. Es una parte importante de la identidad raizal y un símbolo cultural de patrimonio de estas islas, en las que muchos de sus habitantes derivan parte de sus sustento del mismo.

La extracción y comercialización de esta especie se considera el tercer nivel de la economía en Providencia y Santa Catalina, ya que aproximadamente 160 familias dependen exclusivamente de la comercialización de cangrejo negro para sobrevivir.

La especie está en peligro de extinción en las islas, debido a aspectos como la caza indiscriminada e ilegal, la reducción del bosque, los depredadores y las dificultades que tienen para sobrevivir durante sus períodos de reproducción y migración, entre otros.

El cangrejo negro es una especie vulnerable a la extinción en el Archipiélago de San Andrés. | Foto: Coralina

Precisamente, teniendo en cuenta estas amenazas y debido a las constantes presiones sobre esta especie, Coralina adoptó acciones de protección que se enmarcan en la prohibición de la caza y extracción de la especie por un tiempo limitado, el cual se extiende desde el primero de abril hasta el 31 de julio. Cada año se cumple con estas mismas medidas.

El director de la entidad ambiental, Arne Britton, explicó que en el marco de la Resolución 156 de 1993 y 1132 de 2006, la Corporación empezó la veda de este crustáceo que tiene un plan de manejo especial por su vulnerabilidad y su importancia tanto ecológica como económica los habitantes del Archipiélago. Por esta razón hizo un llamado a los habitantes de las islas para que ayuden a cuidar durante este tiempo esta especie.

Las personas pueden cuidar a este crustáceo, evitando la caza, la captura en las zonas migratorias o en cualquier parte del Archipiélago y también la comercialización.

Indicó que como autoridad ambiental vienen trabajando en una estrategia para que los restaurantes lo eliminen de su menú de forma temporal, durante estos cuatro meses, para que esto no incentive la caza de ejemplares de esta especie.

Los operativos de las autoridades tanto ambientales como de policía serán permanentes con el fin de controlar y hacer cumplir estas prohibiciones.

Cangrejo negro hallado en Providencia luego del paso del huracán Iota. | Foto: Ruby Marcela Pérez/Instituto Humboldt

También hace un llamado a los conductores para que no transiten por las vías por donde los cangrejos realizan sus migraciones hacia el mar, especialmente en horarios que oscilan entre las 6 de la tarde y las 6 de la mañana, momento en que estos animales aprovechan para moverse porque es cuando baja el sol y hay mayor humedad.

“Vamos a establecer retenes de retorno para que no haya tránsito dependiendo de la cantidad de cangrejo migratorio”, dijo el funcionario.

Recomendaciones de protección

• Respete el ciclo de vida del cangrejo negro, su supervivencia depende de eso.

• Respete el período de la veda.

• Dé a las hembras el camino en las calles para que puedan alcanzar el mar y desovar sus huevos en el agua y trate de no matar a los cangrejos bebés que regresan al bosque.

• No queme ni destruya el bosque, es su hogar.

• No capture a las hembras con huevos o cangrejos pequeños antes de que se reproduzcan.

• No lo solicite en los restaurantes durante el período de prohibición.

• Si conoce la comercialización del cangrejo negro en el período de veda, infórmelo a las autoridades ambientales.

• No deseche su basura en el mar.

• Mantenga la playa limpia.