La conservación del Amazonas, considerada la selva tropical más grande del mundo, es responsabilidad de todos. El 44,3 por ciento del territorio colombiano es amazónico y en esta región viven la mitad de nuestros pueblos indígenas. Su biodiversidad representa una riqueza inmensa que está amenazada por la deforestación.
Según la Coalición de Economía Circular en América Latina y el Caribe, 9 de los 24 frentes de deforestación en el mundo se encuentran en la región, especialmente en la Amazonía. Y en 2020 Colombia ocupó el puesto seis entre las naciones que presentaron mayor pérdida de bosques primarios, con casi 200 mil hectáreas, de acuerdo al Global Forest Watch.
Además, los datos reportados por el IDEAM en 2019 evidencian que 6 de los 12 núcleos principales de deforestación del país están en la Amazonía. Todas estas noticias motivaron a entidades como el Banco Popular a actuar.
Uno de los componentes de su línea de sostenibilidad es justamente una estrategia voluntaria de compensación del 35 por ciento de la huella de carbono corporativa del 2021.
En este propósito el banco unió fuerzas con Amazonía Emprende, una organización que promueve la restauración ecológica y la preservación de ecosistemas naturales. El proyecto consiste en la siembra de 3.316 árboles en la Escuela Bosque, un área de casi 30 hectáreas en Florencia, Caquetá.
“Desde Banco Popular hemos avanzado en nuestro compromiso con la sostenibilidad de cara a lograr nuestra Visión 2025. Por esa razón tomamos acciones decididas que nos permitan consolidarnos como un banco cada vez más sostenible, para sembrar y dejar una huella positiva para el mañana”, señalaron desde la entidad.
De los árboles que se sembrarán, el 70 por ciento son especies forestales amazónicas, entre ellas Achapo, Tamarindo, Laurel, Cedro y Perillo; y el 30 por ciento restante corresponde a especies agroforestales amazónicas como Achiote, Camu-camu y Cacao. Estos procesos de siembra también generarán ingresos a las familias de la zona.
Igualmente, en el marco del proyecto se capacitará mensualmente a 30 jóvenes de la región en temas relacionados con preservación, emprendimientos sostenibles (polinización de abejas nativas) y turismo regenerativo, entre otros.
El propósito es que este esfuerzo entre Banco Popular y Amazonía Emprende aporte a la meta de un millón de hectáreas restauradas bajo un modelo de conservación, aumentar los ingresos para las familias de la región a partir de modelos productivos sostenibles y vincular a turistas en este tipo de procesos regenerativos.