En medio de una mesa técnica en la que participaron la Alcaldía Distrital de Santiago de Cali, el Dagma, Emcali y la Procuraduría Ambiental; la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca, CVC, dio a conocer lo que sería la ruta de trabajo para mejorar las condiciones ambientales del río Aguacatal, basándose en los resultados de un estudio que se ha venido adelantado entre la CVC y la Universidad del Valle y que se convertiría en referente internacional para este tipo de problemáticas.

Dentro de la jornada, desarrollada en las instalaciones de la Corporación, su director general, Marco Antonio Suárez Gutiérrez, detalló la situación que se presenta eventualmente en la quebrada El Chocho y que afecta al río Aguacatal y, por ende, al río Cali, también.

“Entre las causas que tenemos identificadas desde la Corporación es que esa reacción de coloración anormal del agua en el río obedece a los drenajes, con efluentes ácidos; que aguas arriba aún emanan de antiguas minas de carbón y la materia orgánica que llega a la quebrada El Chocho por los vertimientos sin tratamiento de aguas residuales domésticas de los corregimientos de Golondrinas, Montebello y de la vereda Las Palmas del corregimiento La Castilla, algunos de ellos de asentamientos humanos de desarrollo incompleto”, explicó Suárez Gutiérrez.

El Director General de la CVC resaltó que las actividades de minas ilegales en el sector se encuentran suspendidas desde hace aproximadamente 20 años y a la fecha no existe explotación; sin embargo, existen pasivos ambientales a raíz de dicha actividad, los cuales pueden permanecer por décadas.

Ante esta situación, se estableció una ruta de trabajo teniendo como insumo los resultados del estudio de factibilidad técnica de tratamiento en sitio en la quebrada el Chocho, realizado por la CVC y la Universidad del Valle.

Es la primera vez, desde el surgimiento del problema, que se tiene una ruta técnica definida para la solución de la situación ambiental. | Foto: Cortesía

Este estudio es el primero se realizó en la región para la búsqueda de tratamientos de drenajes de ácidos de minas y es la primera vez, desde el surgimiento del problema, que se tiene una ruta técnica definida para la solución de la situación ambiental.

Entre las alternativas se destaca la ampliación del tratamiento de drenajes ácidos de minas de carbón implementado, así como acciones de mitigación para el pasivo ambiental minero, en este caso, el cierre de las bocaminas ubicadas en el sector, tema en el que la CVC tiene una amplia experiencia tras los trabajos ejecutados en el Cerro La Bandera en Cali y Zaragoza en Buenaventura.

Asimismo, entre la tecnología a implementar para salvar al río Aguacatal, está el tratamiento de los drenajes ácidos de minas de carbón presentes en el sector Alto Aguacatal, empleando sustratos alcalinos dispersos con caliza y óxido de magnesio.

“En el piloto del estudio se trató un caudal de 0,001 L/s también se hicieron pruebas con lechos reactivos preparados con piedra caliza y cascarilla de arroz, que presentaron un mayor incremento en el pH, alcanzando mayores remociones de hierro que los lechos reactivos en los que se usaron astillas de pino”, detalló Suárez, refiriéndose a las pruebas que ya se han venido realizando.

El papel desde la Alcaldía de Cali

Cabe descartar, que en esta labor son importantes otras acciones que se deben ejecutar con el apoyo y liderazgo de la Alcaldía Distrital de Cali: La presentación y cumplimiento de los Planes de Saneamiento y Manejo de Vertimientos – PSMV, la identificación y censo de las viviendas en asentamientos.

La estructuración de un proyecto de solución para el vertimiento de asentamientos humanos de desarrollo incompleto; además, de evaluar la construcción del colector paralelo al río Aguacatal y la adquisición de un lote para la PTAR Montebello (Las Palmas, y Golondrinas), donde la CVC entraría apoyar en su diseño y construcción.