Julio pasado fue el mes más caluroso jamás registrado a nivel mundial, según informó el viernes la agencia estadounidense de administración oceánica y atmosférica (NOAA), en sus últimos datos que ponen de manifiesto la crisis climática. “Julio es habitualmente el mes más caluroso del año, pero julio de 2021 fue el mes más caluroso jamás registrado”, dijo el administrador de la NOAA, Rick Spinrad.
“Este nuevo récord se suma a la inquietante y perturbadora trayectoria que el cambio climático ha marcado para el planeta”, dijo Spinrad, citando datos del los Centros Nacionales de Información Ambiental. La agencia NOAA dijo que la temperatura combinada de la superficie terrestre y oceánica fue de 1,67 grados Fahrenheit por encima de la media del siglo XX, de 60,4 °F, lo que lo convierte en el julio más caliente desde que comenzó el registro hace 142 años.
El mes fue 0,02 °F más alto que el récord anterior establecido en julio de 2016, que fue igualado en 2019 y 2020. Según datos del Servicio de Cambio Climático Copernicus de la Unión Europea, el mes pasado fue el tercer julio más caluroso que se ha registrado.
Es común que las agencias tengan leves diferencias en los datos. La semana pasada, un informe de la ONU sobre el clima provocó impacto al indicar que el mundo se encamina hacia un aumento de temperatura de 1,5 °C en torno a 2030.
El tercero más cálido de la historia
El séptimo mes de este año solo es sobrepasado por los de 2019 y 2016, con temperaturas inusualmente altas en regiones que van desde Finlandia hasta Estados Unidos, en donde las olas de calor fueron crecientes en el periodo analizado. En Europa, por su parte, fue el segundo julio más caluroso registrado, después de 2010.
Se trata de un nuevo dato en una tendencia de calentamiento a largo plazo que ha hecho que los últimos siete años sean los más calurosos en los registros del planeta, según informó el Servicio de Cambio Climático Copernicus de la Unión Europea.
En este periodo, algunas regiones del planeta vivieron olas de calor que causaron miles de muertes y a la vez facilitaron la propagación de incendios, tal y como ocurrió en Canadá, Estados Unidos o Rusia; mientras tanto, otras zonas enfrentaron torrenciales lluvias e inundaciones que desbordaron ríos y causaron graves afectaciones como ocurrió en Alemania, Bélgica o China.
Para los expertos, esta no es más que una consecuencia del calentamiento del planeta, ocasionado por la crisis climática, pues estas alteraciones no se habían visto desde que comenzaron los registros a mediados del siglo XIX.
El modelo de Copernicus combina datos de científicos del Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Estados Unidos, lo que permite un amplio panorama. El programa de la Unión Europea (UE) utiliza miles de millones de mediciones de satélites, barcos, aviones y estaciones meteorológicas de todo el mundo para sus pronósticos mensuales y estacionales.
Una de las grandes preocupaciones es que los días extremadamente calurosos van en aumento en muchos lugares del mundo y por eso el permanente llamado de la Organización de Naciones Unidas (ONU), cuyo secretario, António Guterres, permanentemente les pide a los líderes mundiales tomar acciones inmediatas para evitar llegar a un punto de no retorno. Hasta el momento, el incremento promedio de la temperatura global se sitúa en 1,2 grados por encima de los niveles preindustriales y ya se evidencian grandes catástrofes, inundaciones, huracanes cada vez más fuertes, incrementos en los niveles del mar y olas de calor que están acabando con la vida de miles de personas.
Las estadísticas del estudio también apuntan a que es un 90 % probable que en el periodo 2021-2025 se presente el año más cálido en la historia registrada.