En las últimas horas, autoridades han intentado controlar un incendio forestal que ya lleva una semana impactando zonas de la parte alta del páramo Las Alfombras, en los municipios de Tota y Aquitania, en Boyacá.
Son más de 500 hectáreas las que se prendieron en llamas. Por eso, desde la semana pasada, el director de la Unidad Departamental de Prevención del Riesgo, Manuel Fernando Castellanos, indicó que los bomberos y otros grupos trabajan incansablemente.
Los encargados pidieron apoyo aéreo, ya que una de las zonas no es de fácil acceso. “Ha habido otros incendio, pero por ahora permanecen activos ese cerca de Tota y el de Boyacá. El más grande es en una zona de difícil acceso, por lo que pedimos apoyo aéreo”, explicó Castellanos.
Debido a la situación de desastre medioambiental, 60 municipios se encuentran en alerta roja y 33 en amarilla. Por ahora, queda esperar cómo avanzan las unidades correspondientes que buscan mitigar el riesgo en Boyacá.
Incendio forestal arrasó con parte del páramo del Almorzadero, en Santander
El cuerpo de bomberos de los municipios Carcasí y Cerrito lograron controlar y apagar el incendio que, durante dos días, destruyó parte del páramo del Almorzadero en Santander. La emergencia afectó reservas naturales de gran importancia en la región.
La intensidad de las llamas, que rápidamente se extendieron por el viento, quemó decenas de frailejones y vegetación nativa en el sector conocido como Cueva Grande. Así mismo, según las autoridades, la conflagración alcanzó a llegar hasta lagunas o reservas de agua, límites con el municipio de Chiscas (Boyacá).
“Entre el martes y miércoles se reportó un incendio forestal en límites entre Chiscas (Boyacá) y Carcasí, Santander, donde gracias a la atención de los Bomberos Carcasí y Cerrito lograron controlar este incendio de alta montaña de páramo”, indicó la Oficina de Gestión del Riesgo de Santander (OGRDS).
Aunque autoridades continúan investigando las causas de este incendio, una de las hipótesis hace referencia a que el fuego presuntamente se generó por las altas temperaturas. Sin embargo, no se descarta que los residuos que dejan algunos turistas e incluso personas inescrupulosas sean los causantes de este hecho.
Así mismo, la Corporación Autónoma de Santander (CAS) adelanta las respectivas indagaciones para establecer la cantidad de hectáreas que se vieron afectadas. “Vegetación como frailejones, diversidad biológica que se encuentran en los páramos, es donde se presenta la mayor afectación; esto debido a las altas temperaturas como lo ha dicho el Ideam”.
“Esta temporada también es el inicio de unas estrategias para, coordinar con los concejos municipales de Gestión del Riesgo, articular planes de contingencia y atender en estos tres meses las posibles emergencias que se puedan presentar”, señala la OGRDS.
Temporada seca
Aunque por estos días se han presentado algunas lluvias, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) indicó que los departamentos de Boyacá y Santander están atravesando la temporada seca, lo cual representa una alta posibilidad de incendios forestales.
De acuerdo con la entidad, durante enero, febrero y comienzos de marzo se presentará el primer período de menores precipitaciones del año en la región, así como en el Caribe y la Orinoquia.
“Esta disminución gradual y representativa de las lluvias, favorece el incremento en las temperaturas máximas, el aumento en la probabilidad de ocurrencia de incendios de la cobertura vegetal y la disminución de las temperaturas mínimas en horas de la madrugada, favoreciendo con ello la probabilidad de ocurrencia de heladas meteorológicas”, explica el Ideam.
Así mismo, la entidad ambiental advierte que entre enero y febrero se podrían presentar temperaturas mínimas absolutas inferiores a los 0 °C en las zonas.