Se estima que en el mundo, por cada 1.000 nacidos vivos, entre cinco y nueve padecen de enfermedades del corazón. En Colombia, uno de cada 100 niños nace con una cardiopatía congénita, y solo el 50 por ciento tiene acceso a una atención oportuna, tanto de diagnóstico como de intervención. Una realidad preocupante, porque aunque en el país la atención especializada para la población infantil es de alta calidad y en las principales ciudades de fácil acceso, la realidad es muy diferente en zonas apartadas.
Con el fin de aportar al cierre de brechas en el país, la Fundación Cardioinfantil lidera ‘Regale una vida’, el programa social que le apuesta a impactar y a beneficiar la salud de la población infantil que crece sin tener acceso a controles médicos, ni a exámenes que determinen si padecen alguna enfermedad o condición del corazón.
Según explicó Svetlana Noworyta, gerente de Donaciones y Responsabilidad Social de La Cardio, el programa está acompañado de brigadas en las que participan pediatras, cardiólogos, enfermeros, trabajadores sociales y aliados locales. Se realizan valoraciones en pediatría, electrocardiogramas, ecocardiogramas y, si es necesario, se gestiona el traslado para procedimientos complejos.
“Cuando un niño necesita cirugía lo traemos a Bogotá, lo alojamos en la Casa Ronald McDonald durante 15 días, hacemos los exámenes complementarios, intervenimos, operamos, evaluamos y lo devolvemos a su ciudad de origen”, dijo.
Así, durante 25 años han logrado realizar brigadas en 350 municipios y ciudades como Barranquilla, San Andrés, Maicao, Cartagena, Valledupar, Montería, Cúcuta, Manizales, Duitama, Yopal, Guapi, Neiva, Tumaco, Pasto, Mocoa, Florencia y Leticia.
Noworyta mencionó que el programa evalúa al año entre 3.000 y 3.500 niños en todo el país, hace 1.800 ecocardiogramas y realiza de 200 a 300 intervenciones con cirugía, cateterismo y electrofisiología. El costo por inversión supera el millón de dólares y las cirugías de los niños cuestan más de 8.000 millones de pesos. Para este 2023 la meta es realizar 12 brigadas y por lo menos 250 cirugías a niños y niñas de distintos lugares del territorio nacional.
El programa es de gran impacto porque las cardiopatías, por lo general, suelen ser silenciosas. Si los niños y sus familias no cuentan con la oportunidad de tener un diagnóstico a tiempo, puede presentarse un desenlace que lamentar. “Por eso la importancia de poder tener presencia, sobre todo en las zonas más apartadas, porque no solo hacemos la valoración y el diagnóstico de los niños, sino que de alguna manera le damos tranquilidad a la familia”, indicó.
Un granito de arena
‘Regale una vida’ ha sido posible gracias al apoyo de empresas, organizaciones y donaciones de personas naturales. Uno de los aliados clave es Servibanca, pues a través de los cajeros de la Red Verde las personas pueden donar. La gerente de Donaciones y Responsabilidad Social de La Cardio indica que muchas personas creen que si donan 1.000 pesos no van a aportar, “pero justamente ese monto, más los 1.000 pesos de un millón de personas, es fundamental para nosotros, pues la cirugía de un niño puede costar más de 35 millones de pesos”.
Servibanca, en línea con su compromiso social, ha apoyado a la Fundación Cardioinfantil desde el año 2009, poniendo a disposición de los usuarios de la red la opción de donación, de manera fácil al momento de realizar su transacción de retiro o avance.
Lea también: Las recomendaciones del MinSalud para fortalecer la salud mental en los niños