Durante enero de 2024, Colombia experimentó alrededor de 340 incendios forestales que afectaron a 174 municipios del país. Estos fueron momentos de pánico y angustia, ya que, a pesar de los esfuerzos del cuerpo de bomberos, no se lograba controlar la situación. Sin embargo, una noticia trajo de vuelta la esperanza a los ciudadanos.
Se trata de la sorprendente recuperación de los frailejones en el páramo de Berlín, en Santander. Esta especie vegetal fue una de las más afectadas, ya que durante cuatro días consecutivos las llamas arrasaron con más de 400 hectáreas de bosque virgen, incluyendo 40 hectáreas de frailejones.
Su rápida regeneración ha sido considerada un “milagro”, tanto por usuarios en redes sociales como por expertos en la materia. Aunque inicialmente se pensaba que su recuperación tomaría tiempo debido a la naturaleza del ecosistema, campesinos de la zona y expertos quedaron sorprendidos al ver que ocurrió mucho antes de lo esperado.
¿A qué se debe la rápida recuperación de los frailejones?
Según un estudio realizado por expertos de la Universidad Industrial de Santander, a pesar del panorama desalentador, existe esperanza de que los frailejones calcinados vuelvan a resurgir. Se determinó que, aunque la parte externa de la planta fue consumida por completo por las llamas, el cogollo encargado de su crecimiento aún permanecía húmedo y con agua, protegido por las propias hojas. Diego Suescún, docente del programa de Ingeniería Forestal de la sede Málaga, fue quien afirmó esto.
La presencia de esta especie vegetal es crucial para mejorar el estado del ecosistema, así como para la captación de agua del ambiente y la protección del suelo. Además de la teoría mencionada, los especialistas que visitaron la zona afectada aseguran que los frailejones tienen un mecanismo de defensa en sus hojas que los protege de áreas sensibles y peligrosas. A pesar de estar expuestos a vivir en alturas superiores a los 3.000 metros, en esta ocasión lograron resistir las altas temperaturas del incendio.
La novedad también se dio a conocer gracias a unas imágenes que han circulado en los últimos días a través de las redes sociales, en las que se evidencian los nuevos brotes de esta especie. Sin embargo, los investigadores recomiendan a la comunidad no dejarse llevar por la curiosidad y evitar visitar la zona, ya que podrían pisar la vegetación y afectar su proceso natural de regeneración.
“También es importante destacar que cuando a las personas se les diga, ‘evitemos subir al páramo’, hay que hacer caso de eso porque esa es una zona en ‘cuidados intensivos’ que requiere recuperarse y los especialistas somos los que estamos tratando en tratar de identificar efectivamente qué requiere ese ‘paciente’ para que se pueda recuperar en un mediano o largo plazo, y como estamos viendo, están respondiendo de manera muy positiva con las condiciones climáticas que se han presentado en los últimos días”, puntualizan los expertos de la UIS.
La esperanza persiste y se estima que, para fines de año, los frailejones habrán recuperado al menos un 50 %, siempre y cuando las condiciones climáticas favorezcan el proceso de regeneración.
Es fundamental seguir las recomendaciones proporcionadas por los especialistas para prevenir que una nueva crisis ambiental afecte no solo el páramo, sino también otras áreas del país.