No es común observar especies como los osos de anteojos, claves para los ecosistemas en los que habitan, pero categorizados como “Vulnerables” en el Libro Rojo de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Sin embargo, en los últimos días, dos hermosos ejemplares han sido captados en diferentes zonas del país: uno a través de fototrampeo y el otro de manera directa.
Estos importantes avistamientos se registraron en zona rural del municipio de Íquira, en el Huila y en el Parque Nacional Natural Las Hermosas Gloria Valencia de Castaño.
El registro del Huila se dio gracias al trabajo del Grupo de Monitoreo Áreas Protegidas Santa María Huila (APSH) y el Colectivo Red Visión Verde en articulación con el Parque Nacional Natural Nevado del Huila y el equipo técnico de la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena- CAM; mientras que en Las Hermosas fueron los guardaparques quienes tuvieron la fortuna de encontrarse de frente con este animal.
Para el primer caso, “en las imágenes se puede observar un macho adulto de oso de anteojos, que recorre el bosque en busca de alimento. Se puede apreciar que su contextura corporal es Ideal, lo que evidencia que se encuentra en perfectas condiciones biológicas y que en el área protegida ha encontrado el hábitat propicio para su desarrollo”, explicó Katherine Arenas, bióloga de la CAM.
Las cámaras trampa a través de las cuales se obtuvieron los registros, fueron instaladas en la reserva forestal Tarpeya del municipio de Íquira, área que hace parte de la zona amortiguadora del Distrito Regional de Manejo Integrado DRMI Cerro banderas Ojo Blanco y el Parque Nacional Natural Nevado del Huila, noroccidente del departamento.
Este proceso ha permitido el fortalecimiento de la participación comunitaria en las labores de conservación que se vienen desarrollando en el Huila, a través de la conformación de los grupos de monitores de la biodiversidad.
En este departamento hay diferentes reportes de avistamiento de ejemplares de esta especie y, para ello, la CAM ha venido documentando los registros en los municipios de Santa María, Garzón, Guadalupe, Neiva, Algeciras, Colombia, Palermo, Teruel, Pitalito, San Agustín y ahora en Íquira.
“Es satisfactorio poder lograr estos registros y que queden grabados en imágenes y videos, no es la primera vez que los veo, pero cada vez que se obtiene una imagen del oso me llena el alma y esto es gratificante para mí, como el hecho de saber que tenemos esta importante especie en nuestro municipio” indica Ronald Leandro Aragonés Suárez del Parque Nacional Nevado del Huila.
Por su parte Davidson Harley Lozano Cabrera integrante del grupo de Monitoreo Comunitario APSH indicó que este avistamiento es muy importante porque permite monitorear la especie y conocer más sobre ella.
“No es fácil obtener imágenes del oso, hemos realizado varios recorridos para instalar cámaras trampa y muchas veces no se capturan imágenes, pero en esta ocasión fuimos privilegiados con este registro y estos hallazgos motivan a conocer, monitorear y seguir conservando la biodiversidad de nuestra región”, destacó Juan Sebastián Sáenz, integrante de Red Visión Verde.
Un encuentro natural
En el caso del ejemplar avistado en Las Hermosas, el hallazgo se dio cuando los guardaparques realizaban un recorrido para la recolección de las cámaras trampa que habían instalado a principio de año, llevándose la grata sorpresa al encontrarse a pocos metros, con este animal que curioso se quedó observándolos durante varios minutos y luego se desplazó por el borde de la laguna la Sirena1, hasta subir a una colina donde le perdieron el rastro.
Este encuentro, fue la respuesta final a varias señales que los protectores del Parque habían encontrado y que el animal había dejado durante su transitar libre por el área protegida, entre las que se incluyen picadillo de bromelia (planta alimento favorito de esta especie) en uno de sus comederos y varias heces fecales, que por su aspecto parecían de un tiempo mayor a una semana.
Es de resaltar que, para el Parque, el oso andino es un valor objeto de conservación, al ser una especie esencial para el proceso de dispersión de semillas y equilibrio ecosistémico de la zona.
Desde el año 2017, el equipo que trabaja en este parque ha trabajado en el seguimiento y conocimiento del estado de conservación del oso, bajo una alianza estratégica entre Parques Nacionales Naturales, WWF Colombia e Isagen, implementando el monitoreo de Danta de páramo y de Oso andino.
La importancia de la especie
El Oso de Anteojos es una de las especies más representativas, carismáticas y amenazadas de la diversidad colombiana. Su dieta se compone de frutas silvestres, bayas, cogollos de palmas, raíces de platanillos, pseudobulbos de orquídeas, e incluye insectos como las abejas, larvas de los escarabajos; pequeños mamíferos como ratones y conejos, huevos y polluelos de aves silvestres. Ocasionalmente, esta especie puede alimentarse de ganado joven o que presenta mal estado de salud.
Estos animales cumplen un importante papel como dispersores de semillas por su dieta y dinamizadores del bosque al derribar arbustos, por esta razón algunos autores lo llaman “el jardinero del bosque”. Esta especie es reconocida como una especie sombrilla, ya que al asegurar su conservación y la de su hábitat, se conservan otras especies de animales y plantas.