La Comisión Europea envió este lunes a Apple un pliegue de cargos en el que acusa formalmente a la compañía estadounidense de abuso de posición dominante por limitar a la tecnología inalámbrica NFC las posibilidades para el pago sin contacto ‘Tap to Pay’, que entró en funcionamiento desde febrero.

Esto en la práctica supone restringir la competencia para favorecer a su servicio de pago Apple Pay porque otros desarrolladores no tienen acceso a ese sistema.

“Nos preocupa que Apple haya alterado de manera ilegal la competencia”, aseguró la vicepresidenta del Ejecutivo comunitaria responsable de Competencia, Margrethe Vestager, al explicar la opinión de Bruselas tras la investigación preliminar que inició en junio de 2020.

El Ejecutivo comunitario ve con problema que la compañía impida a desarrolladores de aplicaciones de pago sin contacto acceder a las entradas NFC en los dispositivos de la marca, desde los que los usuarios deben optar por Apple Pay.

El sistema de pago ‘Tap to Pay’ es un servicio con el que los usuarios pueden usar un iPhone como terminal de pago en sus negocios, de modo que los clientes puedan utilizar su iPhone para pagar únicamente acercando el dispositivo móvil.

Apple defiende la necesidad de estas restricciones por razones de seguridad respecto al acceso de datos de los usuarios, pero Vestager ha avisado de que la Comisión Europea “se toma la seguridad muy en serio” pero en su investigación preliminar no ha encontrado “ninguna prueba que apunte tal riesgo”.

Ya no es suficiente brindar a los usuarios únicamente una oferta genérica de productos, servicios digitales y canales de atención; también es necesario responder a las necesidades particulares de cada usuario. | Foto: Getty Images/iStockphoto

En una rueda de prensa, para explicar los detalles del procedimiento, Vestager ha acusado a la compañía de crear un “ecosistema cerrado” para su sistema operativo iOS, del que “controla sus puertas fijando las reglas del juego” para cualquier otro competidor que intente llegar a los usuarios de dispositivo Apple.

La política danesa insiste en las pruebas de las restricciones de acceso a terceros a la tecnología necesaria para desarrollar soluciones de carteras móviles alternativas en los aparatos de Apple y aseguran que si se confirma “tal práctica sería ilegal en materia de competencia”.

El Ejecutivo comunitario teme que con estas restricciones se produzcan efectos de exclusión para sus competidores, se debilite la innovación y se restrinja la elección del consumidor cuando se trata de pago vía móviles iPhone.

Con la formalización de la acusación, las compañías implicadas en una investigación tienen ahora acceso a la documentación y podrán contestar por escrito a las acusaciones. Bruselas advierte que ni el envío del pliego ni la investigación preliminar prejuzgan el resultado final de la investigación, para la que no existe un calendario cerrado para su conclusión.

Por orto lado, Apple explicó en qué consiste su programa de eliminación de aplicaciones que considera obsoletas App Store y destaca la prórroga del plazo límite para el envío de nuevas versiones de las apps, que asciende a 90 días.

El fabricante estadounidense indicó la semana pasada que eliminaría de su plataforma oficial de ‘software’ para dispositivos de la marca aquellas que no cumpliesen ciertos requisitos para funcionar correctamente.

Entonces, se dijo que comenzaría a evaluar todas las categorías de App Store para garantizar que solo estuviesen disponibles aquellas aplicaciones que funcionaran según lo esperado.

En el caso de que encontrase algún problema en estas aplicaciones, la compañía se pondría en contacto con los desarrolladores para que realizasen los cambios pertinentes para mantener sus servicios en la tienda de aplicaciones.

Ahora, Apple aclaró algunas cuestiones acerca de la eliminación de aplicaciones de la App Store y recordó que no se trata de un procedimiento novedoso, sino que comenzó en 2016.

*Con información de Europa Press