Apple ha anunciado que suspenderá la venta de sus últimos ‘smartwatches’, Apple Watch Serie 9 y Apple Watch Ultra 2, que dejará de comercializar en Estados Unidos por haber infringido una patente de la empresa Masimo.
La compañía presentó ambos dispositivos a mediados del pasado mes de septiembre, cuando comentó que integraban el procesador S9, que habilita nuevas funciones como el doble toque para controlarlos sin tocarlos gracias un giroscopio y un acelerómetro, y motores neurales que aprenden de la experiencia del usuario y que hacen más preciso el dictado cuando se interactúa con Siri.
La compañía ha anunciado ahora que “pronto” detendrá las ventas de sus modelos insignia en Estados Unidos debido a problemas con sus patentes y, más concretamente, tras un fallo de la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos (ITC, por sus siglas en inglés), que ha determinado que los de Cupertino infringieron una patente de la empresa tecnológica médica Masimo.
Se trata de una patente asociada a la tecnología del sensor encargado de medir el oxígeno en sangre, Blood Oxygen, integrada en ambos ‘smartwatches’ y que forma parte de las funcionalidades de los relojes de Apple desde la llegada del modelo Apple Watch Series 6.
El origen de este conflicto tuvo lugar en enero de 2020, cuando Masimo interpuso una denuncia contra Apple ante el Tribunal del Distrito de California, en Estados Unidos, por varios casos de infracción en cinco de sus patentes relacionadas con la tecnología de medición de oxígeno en sangre. Meses después, en junio de 2021, la tecnológica médica volvió a demandar a los de Cupertino ante la Comisión de Comercio Internacional.
Desde Masimo siempre han mantenido que en 2013 Apple se puso en contacto con ellos para establecer una colaboración que resultó en una serie de encuentros, que el fabricante de iPhone aprovechó para recopilar información y aplicarla en sus servicios, tal y como recuerda 9to5Mac.
Tras su correspondiente investigación, la ITC determinó en octubre de este año de relojes de la marca infringían la patente de Masimo. Fue entonces cuando le dio a Apple un plazo de 60 días para o bien llegar a un acuerdo con Masimo para apropiarse de la licencia de su tecnología de medición de oxígeno en sangre, o bien apelar a una revisión presidencial para que revoque la sentencia.
A tan solo unos días de que expire el período de revisión de la sentencia por parte de la Administración Biden, que concluye el 25 de diciembre, Apple ha tomado la iniciativa de suspender las ventas de Apple Watch Series 9 y Apple Watch Ultra 2 en Estados Unidos.
En este sentido, la firma ha reconocido haber tomado medidas de manera preventiva para cumplir con la decisión de la ITC. En esta suspensión de ventas no está incluido el Apple Watch SE, puesto que carece del sensor por el que Masimo le acusa de haber infringido sus patentes.
Ambos ‘smartwatches’ dejarán de venderse en la página oficial de la marca a partir del 21 de septiembre y en las tiendas y distribuidores de la firma después del 24 de diciembre, de acuerdo con un comunicado compartido con dicho portal.
Apple ha insistido en que sus equipos “trabajan incansablemente para crear productos y servicios que brinden a los usuarios funciones de salud, bienestar y seguridad líderes en la industria” y que está buscando una serie de opciones legales y técnicas para garantizar que la última familia de Apple Watch esté disponible para los clientes.
La firma seguirá comercializando, no obstante, cualquier Apple Watch con sensor de oxígeno en sangre que esté a la venta, ya que solo se verá afectada la disponibilidad de los dos últimos modelos del Apple Watch.
Apple ha confirmado a 9to5Mac que, una ver concluya este período de revisión presidencial, planea presentar una apelación el próximo martes, 26 de diciembre, en caso de que le dé la razón a Masimo.
Con información de Europa Press