La carrera por conquistar la Luna no solo vincula a Estados Unidos, Rusia o China; Japón también tiene planes para colonizar el satélite y desarrollar una serie de acciones que permitan instalarse de manera permanente en este cuerpo celeste.
La compañía nipona que intentará llevar a cabo este ambicioso plan es ispace, la cual tiene como objetivo crear el ‘Moon Valley’, una ciudad con capacidad para 1.000 personas y para la cual se contempla la construcción, desde cero, de la infraestructura necesaria que permita permanecer a los humanos allí por largos periodos de tiempo de manera “sostenible y eficiente”.
Según han reseñado diferentes portales en el mundo, esta empresa japonesa está empecinada en lograr utilizar el agua que hay en la Luna para desarrollar sus planes, pues no solo sería vital para quienes vivan allí, sino que sería crucial para obtener hidrógeno y lograr fabricar el combustible necesario para los vuelos regulares entre el satélite y el planeta.
Los planes de Japón están enfocados en el año 2040, periodo en el que tendrán que haber avanzado en esa ruta, pues la compañía ispace ve en la Luna un espacio con gran potencial comercial y económico.
“Ha llegado el momento de que el mundo reconsidere cómo explorar y desarrollar el espacio (...) La Luna es un nuevo escenario para los negocios”, señala la compañía japonesa en su página web.
Entre los planes de ispace está el de poder levantar una civilización que pueda gozar de carreteras, comunicación digital, agricultura, medicina, y otros servicios esenciales para una vida permanente lejos de la Tierra.
Mientras esto sucede y Japón trabaja en este proyecto, ispace intenta lograr entender qué pasó con la sonda que envió a la Luna y con la cual perdió comunicación hace unas horas, cuando se tenía previsto que alunizara.
La sonda Hakuto-R partió rumbo al satélite el 11 de diciembre de 2022 desde la base de la Nasa en Cabo Cañaveral, Estados Unidos, y la idea es que explorara el cráter Atlas situado en el borde exterior del Mare Frigoris de la Luna.
Pese a esto, el centro de control de misión perdió contacto con Hakuto-R cuando este aparato comenzó sus maniobras de descenso; en ese sentido, Takeshi Hakamada, CEO y fundador de ispace comunicó a la prensa que la misión no había alcanzado el objetivo y que estaban a la espera de poder recuperar la comunicación con la sonda.
“Tenemos que asumir que no completamos el aterrizaje en la superficie lunar. (...) [Sus ingenieros] están tratando de confirmar el estado de la nave”, indicó Hakamada.
La NASA también busca volver a La Luna, pero con astronautas
La Nasa no quiere quedarse atrás en la reconquista de la Luna y presentó hace unos días a los 4 primeros astronautas, incluida una mujer y un afroamericano, que serán los que tripularán las misiones Artemis, 50 años después de las misiones Apollo.
Se trata de los estadounidenses Gregory R. Wiseman, como comandante, el afroamericano Víctor J. Glover como piloto, y los especialistas de misión Christina Koch, también de la Nasa, y Jeremy Hansen, este último astronauta de la CSA (Canadian Space Agency). Canadá es un socio destacado de la Nasa en el desarrollo del programa Artemis.
La misión, de aproximadamente 10 días de duración, pondrá a prueba los sistemas de soporte vital de la nave Orión, unida al módulo de servicio de la ESA, para demostrar las capacidades y técnicas necesarias para vivir y trabajar en el espacio profundo de un modo que los humanos puedan hacer, informó la Nasa.
Habrá que esperar cómo se desarrolla esta carrera espacial que está alentada por las acciones de las diferentes potencias del mundo que intentan llegar, nuevamente, a la Luna.