La compra de dispositivos móviles de segunda mano es una tendencia creciente, especialmente entre aquellos que buscan tecnología a un costo más accesible. Sin embargo, muchos vendedores intentar ocultar defectos o exagerar las bondades del producto, con el fin de que la persona no se dé cuenta de lo que ocurre.
De hecho, uno de los timos más comunes tiene qué ver con el estado de la batería. Este componente esencial puede reducir considerablemente la vida útil y el rendimiento del dispositivo si no se encuentra en buen estado. Para evitar caer en engaños, existen algunos trucos y pasos a seguir que permiten verificar la salud de la batería y tomar una decisión informada.
No obstante, hay que tener en cuenta que, aunque el usuario cuente con un presupuesto ajustado, es posible acceder a un modelo, pero siempre bajo conocimiento suficiente y oportuno de la compra que se va a realizar. Aunque, esto no evita que la persona, como en cualquier compra de este tipo, pueda caer en ciertos riesgos.
¿Cómo identificar un desgaste en la batería?
Al adquirir un celular de segunda mano, el estado de la batería es un factor crucial. Con el tiempo, las baterías de litio, las más comunes en teléfonos inteligentes, se degradan con el uso. Este proceso es inevitable y depende de la cantidad de ciclos de carga que ha tenido el dispositivo y de su uso diario.
Uno de los primeros indicadores de que la batería está desgastada es que el teléfono se descarga rápidamente o presenta apagones inesperados, incluso cuando el porcentaje de carga es elevado. Para identificar un desgaste en la batería sin necesidad de herramientas adicionales, expertos suelen recomendar observar ciertos detalles en el dispositivo.
Primero, es conveniente analizar visualmente el área donde se encuentra la batería. Aunque hoy en día, muchos teléfonos tienen baterías integradas y no extraíbles, es posible detectar problemas si se nota que la carcasa trasera está abultada. Un abultamiento puede indicar que la batería se ha hinchado, lo cual no solo compromete su duración, sino también la seguridad del equipo.
Además, al encender el teléfono, es buena idea observar cómo se comporta el porcentaje de la batería. Si la persona observa una disminución rápida en poco tiempo, esto puede ser un indicio de desgaste o de un problema de carga. No obstante, para obtener una verificación precisa, lo ideal es apoyarse en métodos más detallados.
¿Qué herramientas de diagnóstico hay?
La mayoría de los teléfonos inteligentes, tanto iOS como Android, cuentan con herramientas que permiten conocer el estado de la batería de manera detallada. Para el caso de dispositivos iOS, existe una función integrada en la configuración del sistema, que proporciona una estimación de la capacidad máxima de la batería en comparación con su estado original. Por ejemplo, si la capacidad máxima se encuentra por debajo del 80 %, es probable que el teléfono necesite un reemplazo de batería para funcionar de manera óptima.
Ahora bien, en el caso de los dispositivos Android, la situación es diferente. Aunque algunos modelos ofrecen opciones de diagnóstico en la configuración del sistema, no todos incluyen una opción específica para verificar la salud de la batería. Sin embargo, en el caso en que sí se pueda, la función informará a la persona sobre la existencia de algún problema, ofreciendo una solución.
Otro truco útil para evitar engaños con la batería al comprar un móvil de segunda mano es analizar su historial de uso. Las baterías de litio están diseñadas para soportar entre 300 y 500 ciclos de carga completos antes de que su rendimiento empiece a decaer significativamente. Un ciclo de carga completo se refiere al proceso de descargar la batería hasta un 0 % y luego cargarla nuevamente al 100 %. Cuantos más ciclos haya experimentado una batería, más probabilidad hay de que su capacidad esté reducida.
En algunos dispositivos, este dato puede verificarse directamente en las configuraciones avanzadas o utilizando herramientas de diagnóstico específicas.