La Universidad de Cornell ha desarrollado un nuevo software para mejorar la búsqueda de señales periódicas que emanan del núcleo de nuestra galaxia, la Vía Láctea.
Esta investigación tiene como objetivo detectar patrones repetitivos, como una forma de buscar inteligencia extraterrestre (SETI) en nuestra galaxia y otros puntos lejanos en el cosmos.
El software BLIPPS (Breakthrough Listen Investigation for Periodic Spectral SignalS), liderado por el doctorando en Astronomía Akshay Suresh y poresentado The Astronomical Journal, se basa en un algoritmo de plegado rápido (FFA), un método de búsqueda eficiente que ofrece una mayor sensibilidad a las secuencias periódicas de pulsos estrechos.
Los púlsares, estrellas de neutrones que giran rápidamente y barren haces de energía de radio a través de la Tierra, son objetos astrofísicos naturales que generan señales periódicas, pero los humanos también usan transmisiones periódicas dirigidas para una variedad de aplicaciones, incluido el radar.
Tales señales serían una buena manera de llamar la atención de alguien a través del espacio interestelar, destacándose del fondo de las señales no periódicas, además de usar mucha menos energía que un transmisor que transmite continuamente.
“BLIPSS es un ejemplo de software de vanguardia como multiplicador científico para SETI”, dijo Suresh en un comunicado. “Nuestro estudio presenta a SETI, por primera vez, el algoritmo de plegado rápido; nuestro software de código abierto utiliza un FFA para analizar más de 1,5 millones de series temporales de señales periódicas en aproximadamente 30 minutos”.
BLIPSS es un esfuerzo de colaboración entre Cornell, el Instituto SETI y Breakthrough Listen. El proyecto mejora significativamente la probabilidad de capturar evidencia de tecnología extraterrestre al enfocarse en la región central de la Vía Láctea, conocida por su densa concentración de estrellas y exoplanetas potencialmente habitables. El centro de la Vía Láctea también sería un lugar ideal para que los extraterrestres coloquen una baliza para contactar con grandes franjas de la galaxia.
El equipo probó su algoritmo en púlsares conocidos y pudo detectar emisiones periódicas como se esperaba. Luego recurrieron a un conjunto de datos más grande de escaneos del Centro Galáctico realizados con el instrumento Breakthrough Listen en el Telescopio Green Bank (GBT) de 100 metros en Virginia Occidental. A diferencia de los púlsares, que emiten a través de una amplia franja de frecuencias de radio, BLIPSS buscó señales repetidas en un rango de frecuencias más estrecho, cubriendo menos de una décima parte del ancho de una estación de radio FM promedio.
“La combinación de estos anchos de banda relativamente estrechos con patrones periódicos podría ser indicativo de actividades tecnológicas deliberadas de civilizaciones inteligentes”, dijo el coautor Steve Croft, científico del proyecto Breakthrough Listen. “Breakthrough Listen captura grandes volúmenes de datos, y la técnica de Akshay proporciona un nuevo método para ayudarnos a buscar agujas en ese pajar que podrían proporcionar evidencia tentadora de formas de vida extraterrestres avanzadas”.
“Hasta ahora, la radio SETI ha dedicado principalmente sus esfuerzos a la búsqueda de señales continuas”, dijo el coautor Vishal Gajjar, astrónomo del Instituto SETI. “Nuestro estudio arroja luz sobre la notable eficiencia energética de un tren de pulsos como medio de comunicación interestelar a través de grandes distancias. En particular, este estudio marca el primer esfuerzo integral para realizar búsquedas en profundidad de estas señales”.
¿Por qué los extraterrestres aún no han visitado la Tierra? Científico dice tener la respuesta
Amri Wandel, astrofísico de la Universidad Hebrea de Jerusalén, publicó un artículo científico en donde argumenta que la ausencia de un contacto entre la Tierra y otras civilizaciones extraterrestres se debe a que la especie humana no cuenta con un desarrollo tecnológico que esté a la altura de razas más avanzadas.
Wandel teoriza que bajo el supuesto de que haya vida inteligente en otros planetas que están más lejos de nuestro sistema solar, posiblemente los extraterrestres que gocen de grandes avances tecnológicos no se sientan atraídos a interactuar con la Tierra al considerar que es un mundo habitado por una raza primitiva. De manera que el contacto no tendría un propósito provechoso para la civilización más tecnológicamente desarrollada.
Pese a que el planteamiento de Amri Wandel está basado en el hipotético escenario de que la vida extraterrestre existe, hay otras posturas que tratan de explicar la ausencia del contacto humano con razas alienígenas de una manera más radical.
Anteriormente, un grupo de científicos que hacen parte del laboratorio de Propulsión a Chorro de la Nasa de CalTech desarrollaron un artículo en donde presentan un análisis a la teoría “gran filtro”, la cual establece que hubo civilizaciones alienígenas antiguas cuya existencia fue erradicada del cosmos por su propia mano o por otras causas.
La teoría desarrollada por el equipo de la Nasa plantea que las civilizaciones habrían llegado a su fin debido a crisis climáticas en sus planetas, por lo que, antes de llegar a nosotros, los extraterrestres se habrían ya autodestruido.
Debido a que las grandes razas extraterrestres se eliminaron ellas misas, es imposible que la especie humana pueda tener un contacto con ellas.
De igual manera, otros científicos consideran que la Tierra no ha sido visitada por extraterrestres debido a que esas especies inteligentes aún no han desarrollado una tecnología que les permita hacer viajes espaciales de larga distancia en poco tiempo. Por lo que habría igualdad de condiciones con los humanos en términos de tecnológicos.
Con información de Europa Press