Vladimir Putin sigue ampliando su vasto arsenal militar y este martes presenció la botadura de un nuevo submarino capaz de portar drones nucleares subacuáticos, un arma tan apocalíptica que hasta es capaz de causar un devastador tsunami. Durante la visita a un astillero militar en San Petersburgo, Putin observó por teleconferencia la partida del submarino nuclear Belgorod en la planta Sevmash, en Severodivinsk, en el noroeste de Rusia. El sumergible pesa 14.700 toneladas, es el más largo del mundo -184 metros de largo y 18,2 de alto- y además cuenta con ojivas nucleares guiadas mediante inteligencia artificial. Cada ojiva puede generar dos megatones de potencia explosiva, esto es más de 130 veces la potencia de las bombas lanzadas a Hiroshima y Nagasaki en la Segunda Guerra Mundial. Puede leer: Avangard, el avanzado misil hipersónico con el que Putin amenaza a Estados Unidos El Poseidón puede ser dirigido contra zonas costeras y es tal la potencia de su armamento que es capaz de crear tsunamis radioactivos poniendo en peligro las ciudades del enemigo con olas de hasta 100 metros de altura. El Poseidón puede ser dirigido contra zonas costeras y es tal la potencia de su armamento que es capaz de crear tsunamis radioactivos poniendo en peligro las ciudades del enemigo con olas de hasta 100 metros de altura. El submarino está diseñado para llevar ocho vehículos subacuáticos no tripulados y equipados con mini reactores nucleares, capaces de recorrer kilómetros bajo la superficie del mar. Estos drones se puden utilizar para realizar misiones como el cartografiado del fondo marino, o el sabotaje de cables submarinos y de infraestructuras petrolíferas. La marina rusa afirmó que el submarino entrará en servicio el año entrante. Mientras que Putin ha dicho que las pruebas del arma hasta ahora han sido exitosas. El madatario ruso mencionó por primera vez el dron de propulsión nuclear en su informe anual de gobierno del año pasado, en el que señaló que esta arma hace prácticamente inútiles los sistemas de defensa de misiles de Estados Unidos. En comienzo, el lugar de operación de este impresionante vehículo serán los mares del Atlántico Norte y al Ártico, en estas zonas oceánicas la actividad militar rusa se ha multiplicado por 10 en la últimos años. Este no es el único ‘juguete’ con el que el Kremlin rearmó a sus Fuerzas Armadas. En diciembre del año pasado, Putin sorprendió al mundo con la prueba de Avangard, un misil supersónico capaz de superar el escudo antimisiles estadounidense. Le recomendamos: Las brujas que apoyan a Putin con hechizos y rituales ocultistas "Rusia tiene un nuevo tipo de arma estratégica. En 2019 el nuevo sistema estratégico intercontinental Avangard entrará en servicio en las Fuerzas Armadas", informó el Kremlin. En la prueba el proyectil recorrió unos 6.000 kilómetros desde la región de los Urales hasta el polígono de tiro de Kura en la península de Kamchatka (extremo oriente ruso). "El ensayo ha sido un completo éxito. Este es un acontecimiento importante. Somos los primeros en tener este tipo de arma estratégica", dijo Putin. En febrero pasado, Putin amenazó con ubicar misiles capaces de alcanzar "territorios donde se encuentran los centros de decisión", en respuesta a la ubicación por parte de Estados Unidos de nuevos sistemas en Europa. Rusia no es el único país que ha hecho esfuerzos para el desarrollo de vehículos acuáticos no tripulados. La Armada Británica, que dominó los mares europeos desde el siglo XVI, ha trabajado en proyectos relacionados, pero sus primeros drones submarinos estarían disponibles dentro de ocho años.