Por varias décadas, el ser humano ha imaginado todo tipo de escenarios en los que se podría dar una comunicación con razas alienígenas que viven en mundos ubicados en galaxias lejanas. Inclusive, algunos han teorizado que la humanidad ya ha tenido un contacto cercano con extraterrestres, pero debido a que son especies con una tecnología superior, los habitantes de la Tierra no han notado la presencia de esos seres.

De hecho, la mayoría de estos relatos han sido principalmente impulsados por la ciencia ficción y por personas que disfrutan generar todo tipo de teorías conspirativas. Por esta razón, la posibilidad de que la humanidad pueda establecer un vínculo con vida inteligente de otros planetas aún sigue siendo un evento poco probable.

Sin embargo, un reciente estudio realizado por un equipo de investigadores de la Universidad de California podría establecer la fecha en la que se daría un primer posible contacto con extraterrestres. Este estudio plantea la fecha en que habitantes de otro mundo lanzarían una respuesta a las señales de contacto que son emitidas por las sondas espaciales Voyager 1 y 2.

Ovnis moviéndose cerca a la Tierra. | Foto: Bing Image Creator

¿Cómo se determinó esta fecha?

Los autores del estudio estiman que las señales emitidas por las sondas de la Nasa podrían ser contestadas por civilizaciones alienígenas antes de que termine el 2029, de manera que para finales de esta década los habitantes de la Tierra podrían tener evidencia sólida sobre la existencia de vida inteligente en otros sitios del cosmos.

El estudio dirigido por Howard Isaacson, líder del equipo de la Universidad de California, sostiene que la respuesta de las señales enviadas por la Nasa en 2002 serían capturadas por los instrumentos de la agencia en 2029.

“Resaltamos las estrellas que están en el fondo de las transmisiones de DSN y calculamos las fechas de estos encuentros para determinar la hora y el lugar para la vida extraterrestre inteligente potencial para encontrar transmisiones terrestres”, indica una parte del estudio presentado por la Nasa.

No obstante, es importante precisar que otras voces de la comunidad científica tienen serias dudas sobre la posibilidad de que el ser humano pueda llegar a tener contacto con vida inteligente de otros planetas. Según el astrónomo Jean-Luc Margot, quien hace parte de la misma universidad de la que procede el estudio de Isaacson, cuestionó la idea de que unas transmisiones “insignificantes e infrecuentes” puedan ayudar a determinar si existen civilizaciones alienígenas y que estas quieren comunicarse con la humanidad.

Astrofísicos tienen la teoría de que hay una nave nodriza varada en el sistema solar controlada por una IA | Foto: Bing Image Creator

¿Naves extraterrestres en nuestro sistema solar son milenarias IA?

Abraham Loeb, director del Instituto para la Teoría y la Computación del Centro de Astrofísica Harvard-Smithsonian, planteó una teoría sobre la aparente existencia de una enorme nave extraterrestre, que no tendría una tripulación orgánica al ser una gran máquina que es controlada por una inteligencia artificial (IA) creada hace miles de años.

De acuerdo con el planteamiento de Loeb, es poco posible que nuestro sistema solar albergue visitantes extraterrestres que provengan de planetas lejanos, debido a que las criaturas con una composición biológica no podrían resistir los miles de años que requieren para poder recorrer las distancias que hay diferentes galaxias.

Científicos tienen la tesis de que existe una nave nodriza alienígena varada en el sistema solar. | Foto: Bing Image Creator

En ese orden de ideas, el experto estima que en caso de se diera el hipotético escenario en que la humanidad logre tener contacto con una nave espacial construida por una raza alienígena, realmente se trataría de un encuentro con entidad sintética como una inteligencia artificial que tendría el control del vehículo espacial.

Según recoge el portal web de History Channel, Abraham Loeb afirma que dicho encuentro podría demostrar que las inteligencias artificiales son sistemas que existen siglos antes de que el ser humano empezara a experimentar con dicha tecnología.