La luna, compañera celestial de la Tierra, ha cautivado durante mucho tiempo la imaginación humana y la curiosidad científica. Descubrimientos científicos recientes han arrojado nueva luz sobre la composición interna y la estructura de nuestro vecino lunar, proporcionando fascinantes conocimientos sobre su formación y evolución.
Un estudio reciente ha revelado detalles desconocidos sobre el interior de la Luna, replanteando las teorías sobre el campo magnético lunar. Los hallazgos, publicados en mayo de 2023 en la revista Nature, ofrecen información crucial sobre la historia geológica del satélite y su interacción con la Tierra.
La Luna y su núcleo: un descubrimiento sólido
Durante décadas, los modelos sismológicos obtenidos de las misiones Apolo brindaron las primeras pistas sobre la estructura interna de la Luna.
Estos registros mostraron una disminución en la velocidad de las ondas sísmicas en el límite entre el núcleo y el manto. Sin embargo, las técnicas disponibles entonces no permitían determinar con precisión el estado del núcleo interno.
- La nueva investigación, liderada por Arthur Briaud del Centro Nacional de Investigación Científica de Francia, concluye que la Luna tiene un núcleo interno sólido, con una densidad aproximada de 7.822 kilogramos por metro cúbico, similar a la del hierro.
Este núcleo interno tiene un radio de 258 kilómetros, rodeado por un núcleo externo fluido con un radio de 362 kilómetros, lo que equivale al 15% del radio total de la Luna. Los resultados son comparables a la estructura del núcleo de la Tierra, que también posee una capa externa líquida y un núcleo interno sólido.
Implicaciones para el campo magnético lunar
El estudio plantea interrogantes sobre la evolución del campo magnético de la Luna. En el pasado, la Luna poseía un campo magnético significativo, pero su duración y las causas de su desaparición han sido objeto de debate científico.
“Nuestros resultados cuestionan la evolución del campo magnético de la Luna gracias a su demostración de la existencia del núcleo interno y apoyan un escenario de vuelco del manto global” señalan los autores.
- Este fenómeno, que implica un movimiento significativo del manto lunar, aporta pistas sobre los eventos ocurridos durante el primer milenio del sistema solar, como el bombardeo de asteroides y cometas.
La interacción gravitacional entre la Luna y la Tierra también influye en su deformación interna. Los datos obtenidos mediante mediciones láser y análisis de misiones espaciales refuerzan esta teoría y proporcionan un perfil detallado de las características internas del satélite.
Resolviendo el misterio del núcleo lunar
A pesar de los avances, la resolución de los datos sísmicos recopilados por Apolo sigue siendo limitada, lo que dificulta confirmar algunos detalles del núcleo interno.
Sin embargo, los modelos actuales muestran que tanto un núcleo interno sólido como un núcleo completamente fluido son consistentes con estos datos.
El nuevo enfoque adoptado por el equipo de Briaud, que combina información de misiones espaciales con experimentos modernos, ofrece una perspectiva más clara. Los investigadores concluyen que esta investigación funciona como prueba de que la Luna cuenta con un interior sólido, una hipótesis que podría aclarar uno de los grandes misterios sobre su evolución.
La confirmación de este núcleo sólido no solo es relevante para comprender la Luna, sino que también amplía el conocimiento sobre cómo se forman y evolucionan los cuerpos celestes en el sistema solar.
Nuevas puertas hacia la exploración espacial
Este avance abre nuevas posibilidades para futuras investigaciones y misiones lunares. La información obtenida puede ser crucial para la planificación de proyectos espaciales, como la instalación de bases permanentes en la Luna o la extracción de recursos en su superficie.