El ahorro siempre será una meta común en los hogares y una de las áreas donde más impacto puede tener es, precisamente, los servicios públicos. En vista de que algunos recibos se cobran en función del consumo, el derroche deriva en cobros más voluminosos.

No obstante, el gasto energético elevado no depende exclusivamente de la intensidad con que se utilizan los aparatos eléctricos dentro del hogar. Si bien guardan una relación, existen otros elementos a tener cuenta durante el análisis.

En ese orden de ideas, la primera estrategia para ahorrar energía dentro del hogar consiste en reducir el uso de artefactos eléctricos. Por ejemplo, ver menos televisión, usar con menor frecuencia el horno y mantener los bombillos apagados. Sin embargo, no siempre es sencillo mantener esta dinámica en aras del ahorro.

En tal virtud, según reseña el portal Computer Hoy, es posible acudir a ciertos dispositivos para ahorrar energía de manera pasiva, es decir, sin tener que renunciar totalmente a la utilización de artefactos que funcionen mediante energía eléctrica.

Los dispositivos a los que hace referencia el artículo citado se caracterizan por ser inteligentes, pues permiten programar, por ejemplo, el encendido y apagado. Así mismo, fueron diseñados para optimizar el gasto energético, funcionando con la menor cantidad de energía posible.

Algunas estrategias sencillas pueden ayudar a reducir el gasto de energía eléctrica en el hogar. | Foto: Getty Images

1. Bombillas inteligentes con wifi

Este tipo de bombillas ofrece la posibilidad de atenuar la luz en función de la necesidad del momento. En consecuencia, no operan todo el tiempo al 100 % de su intensidad y permiten optimizar el consumo eléctrico.

2. Enchufes programables

Los enchufes de esta categoría permiten que la persona programe, por ejemplo, en qué momento desea que funcione. Para ello, utiliza un temporizador que a su vez abre y cierra el circuito eléctrico automáticamente y durante un tiempo determinado.

3. Termostatos inteligentes para la calefacción

El concepto es el mismo que el de las bombillas inteligentes. Estos artefactos permiten regular la intensidad, evitando que la caldera opere todo el tiempo al 100 % de su capacidad.

También se pueden programar de manera que mantengan una temperatura constante, por ejemplo, para que se apaguen automáticamente cuando hayan alcanzado cierto número de grados.

Existen bombillos que utilizan menos energía para funcionar. | Foto: Getty Images

4. Aire acondicionado con bomba de calor o estufa de gas butano

Según el citado portal, las bombas de calor son un tipo de calefacción popular en España y destacan por su eficiencia. “Otra opción son las estufas de gas butano, que en precio son las que más baratas salen a largo plazo, además con sistemas de seguridad bastante mejorados para evitar accidentes y fugas”, agrega.

5. Generador portátil con carga solar

Estos generadores son populares entre los fanáticos del camping. Mediante el uso de paneles, aprovecha la luz solar para almacenar energía y permitir, por ejemplo, la carga de dispositivos móviles y algunos electrodomésticos.

Por supuesto, las ventajas que ofrecen estos generadores también pueden direccionarse hacia el hogar, utilizándolos para tareas simples como cargar el dispositivo móvil, el computador portátil o recurrir a electrométricos cuyo consumo no sea tan alto y funcione con la energía almacenada en el generador con carga solar.

Es recomendable desconectar los electrométricos cuando no se están utilizando para evitar el famoso "consumo vampiro". | Foto: Getty Images

Vale mencionar que el empleo de los artefactos mencionados previamente no hará que el gasto total de energía eléctrica en el hogar se reduzca de manera drástica. Aun así, podría aportar su ‘granito de arena’ para optimizar el consumo y ahorrar algunos pesos a la hora de pagar la factura.

En ese sentido, para aprovechar mejor los beneficios que ofrece el empleo de estos dispositivos, resulta útil implementar otras técnicas de ahorro, como desconectar los electrodomésticos cuando no están en uso, apagar los bombillos cuando su luz no es necesaria y programar inspecciones en la red para identificar eventuales daños.