La ciberseguridad se convirtió en un tema de moda, principalmente porque cada vez más incrementa el número de personas que adquieren un teléfono celular.

De acuerdo con expertos, uno de los ‘talones de Aquiles’ que representa el hecho de interactuar mediante dispositivos móviles es el robo de datos y los virus.

Respecto al robo de datos, el sitio web Kaspersky consigna que se trata de toda la información que se almacena en equipos, servidores o dispositivos electrónicos y es utilizada de manera fraudulenta por terceros para afectar la privacidad de los dueños de dicha información.

En cuanto a los virus, también llamados malware, los conocedores del tema tecnológico indican que son programas que, por diversas causas, resultan instalándose en el teléfono inteligente y truncan el funcionamiento, mientras se apoderan de contenidos como fotos, videos, chats, entre otros.

En ese sentido, tener un celular a la mano hoy en día demanda responsabilidad y cuidado constante, pues la delincuencia digital puede estar más cerca de lo que se cree.

En efecto, hay que reconocer o distinguir los momentos en los que las herramientas de comunicación presentan fallas por virus.

No tener batería en el celular puede causar estrés. Getty Images. | Foto: Getty Images

Señales de alerta

Existe una buena parte de consumidores digitales que no le prestan atención al comportamiento de sus celulares e incluso justifican cualquier daño o error con el tiempo; sin embargo, el dispositivo móvil pueden empezar a tener cambios repentinos que, de no ser tratados con rapidez, representan peligros.

Teniendo en cuenta varios blogs de tecnología, como Xataca y Computer Hoy, los celulares se ven constantemente expuestos, así que lo mejor es conocer el dispositivo y prestarle atención a un par de señales de alerta.

Por ejemplo, hay denuncias de usuarios quienes alertan sobre el recibimiento de llamadas de números desconocidos que no provienen del país de origen donde se encuentran. Para los expertos, esto es una señal de ciberdelincuentes tratando de robar datos de índole personal para instalar virus.

Asimismo, en el celular pueden aparecer mensajes de texto “maquillados”, es decir, que se hacen pasar por empresas calificadas. Antes de dar respuesta a algunas de estas conversaciones, lo mejor es comunicarse directamente con los prestadores de servicios.

Por otro lado, el celular puede llegar a tener anuncios emergentes, los cuales suelen presentarse en forma de publicidad. En consecuencia, hay usuarios que no los reconocen y caen en la trampa. En adición, con los anuncios emergentes suelen adjuntarse links que traen consigo virus.

En la misma vertiente, cuando se detecta malware en un teléfono inteligente, la duración de la batería y los datos móviles disminuyen. Los especialistas en reparación técnica explican que esto pasa porque las apps maliciosas actúan en segundo plano y hacen que el móvil requiera de más esfuerzo para trabajar.

Batería del celular. | Foto: Getty Images

Como si fuera poco, cuando se presenta virus, el correo electrónico que se encuentra abierto en el celular se puede ver comprometido.

En consecuencia, la bandeja de entrada del mail acumula miles de mensajes con promociones, ofertas u otros asuntos para que el usuario caiga en la trampa de abrir alguno de estos y, luego de ello, le otorgue permisos a delincuentes digitales.

De igual forma, existen aplicaciones que resultan ser la fachada de otras apps maliciosas. Los expertos indican que varias de estas se camuflan brindando opciones de menús llamativos para darle un nuevo aspecto al smartphone.

Los virus o malware pueden truncar por completo el funcionamiento de los dispositivos móviles. | Foto: Getty Images

Por último, pero no menos importante, el celular presenta intermitencia o pausas. Esta advertencia es parecida a la de la poca duración de la batería y los datos móviles. Si el celular tiene virus trata de defenderse y, por ende, fuerza su sistema operativo para que actúe rápidamente, haciendo que los procesos internos colapsen y la interacción sea lenta.